Psicodelia

Un último baile con sabor a California

Un último baile con sabor a California

Desde Los Ángeles surge Strawflower, una banda que apuesta por un sonido que mezcla lo retro con lo actual. Su propuesta busca conectar con quienes disfrutan de la nostalgia sin dejar de lado la frescura que trae consigo una nueva generación musical. En su reciente lanzamiento, Last Slow Dance, se percibe esa intención de mantener vivo un estilo clásico mientras lo atraviesan con matices modernos.

El tema se mueve entre atmósferas de space rock y tintes psicodélicos, construyendo un ambiente sonoro que transporta a escenarios playeros y atardeceres californianos. La banda describe esta pieza como un recorrido cargado de vibra surf, con un ritmo que invita a escucharlo sin prisas. En Last Slow Dance, no buscan reinventar el género, sino darle un giro personal y mantenerlo vigente.



Lo interesante de esta canción es cómo Strawflower logra que la nostalgia no suene a repetición. Al contrario, integran influencias que enriquecen la experiencia auditiva y dan espacio a un sonido que respira autenticidad. No se trata de imitar, sino de aportar un matiz propio dentro de un estilo muy trabajado en la escena musical.

Con este lanzamiento, Strawflower no solo comparte una canción, sino también una invitación a dejarse llevar por un ritmo pausado y envolvente. Last Slow Dance puede entenderse como una mirada hacia el pasado desde un presente creativo, donde la influencia californiana sigue marcando el pulso de su propuesta musical.


Entre teclas y sueños: Leon Rosen presenta Classicaelish

Entre teclas y sueños: Leon Rosen presenta Classicaelish

Desde los días en que su talento para el piano lo llevó a compartir escenario con figuras como Herbie Lewis y Sonny Simmons, Leon Rosen ha recorrido un camino que combina exploración artística y búsqueda personal. Nacido en San Francisco, hijo de un pintor abstracto y una periodista que antes fue bailarina, su formación siempre estuvo marcada por la intersección entre lo visual, lo sonoro y lo narrativo. En Classicaelish, el piano no es solo acompañamiento: es la columna vertebral de una atmósfera que flota entre el dream pop y el pop psicodélico.

El trayecto de Rosen no fue directo hacia el micrófono. Durante años se concentró en perfeccionar su ejecución pianística, incluso trasladándose a Nueva York para estudiar en un entorno tan exigente como vibrante. Más tarde, su vida lo llevó a Jerusalén, donde se sumergió en la escena subterránea jasídica. Fue allí cuando un sueño, con Tom Waits como protagonista, lo empujó a repensar su relación con el canto. No se trataba de alcanzar notas perfectas, sino de colocarlas con intención.


Tras un largo periodo de entrenamiento vocal, Rosen comenzó a moldear un sonido propio. En Classicaelish se percibe esa fusión de influencias: la soltura del jazz, la calidez del pop setentero y ciertos matices electrónicos que actualizan la propuesta. La voz, con un timbre adormilado de tenor, se desliza entre capas instrumentales que invitan a un estado de ensoñación, mientras el piano marca transiciones que funcionan casi como diálogos internos.

Hoy, además de la música, Rosen proyecta su visión hacia lo cinematográfico. Tras el lanzamiento de Café Dogs, planea llevar a la pantalla un filme inspirado en su álbum, con Tokio como escenario. Mientras tanto, Classicaelish queda como una muestra de cómo el tiempo, las vivencias y la persistencia pueden transformar no solo una técnica, sino una manera completa de habitar la música.


El reflejo inquietante de HAPPY FACE

El reflejo inquietante de HAPPY FACE

En HAPPY FACE, Moon Walker despliega un rock que no teme mezclarse con destellos de psicodelia, algo que el videoclip acentúa. Harry Springer, mente detrás del proyecto, compone, produce y graba toda su música desde su habitación, pero el resultado transmite la energía de un escenario mucho más grande. No es casual que, desde sus primeros lanzamientos, haya logrado llamar la atención de figuras consolidadas del rock.

El proyecto nació en pleno confinamiento, cuando Springer buscaba vender canciones a bibliotecas musicales para ganar algo de dinero. Sin embargo, hubo piezas que se resistió a entregar, y esas terminaron dando forma a su primer álbum, Truth to Power, que le abrió paso rápidamente en la escena gracias a su impacto en redes como TikTok y el respaldo de artistas como Justin Hawkins, de The Darkness. Con ese impulso, Moon Walker no tardó en consolidar un estilo que, aunque gestado en soledad, suena expansivo.



Menos de un año después, Springer regresó con su segundo trabajo, The Attack of Mirrors, un álbum que refuerza la idea de que su propuesta no se limita a un molde. HAPPY FACE se inserta dentro de este universo, llevando su sonido hacia un territorio que mezcla riffs firmes, secciones hipnóticas y una estética visual que dialoga con la música. El resultado es una pieza que, más que contar una historia lineal, propone sensaciones que se mueven entre lo enérgico y lo enigmático.

En esta etapa, Moon Walker parece más interesado en construir atmósferas que en repetir fórmulas. HAPPY FACE se siente como un reflejo distorsionado, una invitación a mirar de cerca aquello que normalmente pasamos por alto. Con cada nueva entrega, Springer muestra que el confinamiento no limitó su creatividad, sino que se convirtió en el laboratorio desde el cual sigue moldeando un rock con identidad propia.


The Flints: El dúo gemelo que reinventa el pop psicodélico desde Manchester

The Flints: El dúo gemelo que reinventa el pop psicodélico desde Manchester

George y Henry Flint, hermanos gemelos originarios de Manchester, Reino Unido, están conquistando la escena musical con su proyecto The Flints, una propuesta que fusiona el pop psicodélico con la energía contagiosa del disco clásico de los años 70. Tras años de experiencia como productores y compositores para artistas reconocidos, los hermanos decidieron crear música para ellos mismos, encontrando así una identidad sonora única que combina lo vintage con lo contemporáneo.

Su más reciente lanzamiento, el EP 21st Century Love, previsto para el 15 de agosto, muestra una evolución en su sonido: más seguro, emocional y con una producción que mezcla texturas espaciales y ritmos envolventes.



El sencillo destacado, Supernatural Feelings, es un viaje entre lo onírico y lo terrenal, una exploración musical que captura la incertidumbre y la conexión en relaciones a distancia, con guitarras brillantes, teclados cálidos y una base rítmica relajada que envuelve al oyente en una atmósfera hipnótica.

The Flints ha tenido la oportunidad de compartir escenario con leyendas de la música electrónica como Justice, durante la gira mundial Hyperdrama, experiencia que les ha permitido replantear su identidad artística y explorar con valentía nuevas direcciones sonoras. Su estrecha química musical, cultivada desde la infancia, se refleja en las armonías vocales y la cohesión de sus composiciones, dando lugar a un sonido que es a la vez íntimo y expansivo.

Con una mezcla de nostalgia y modernidad, The Flints se posiciona como uno de los proyectos más prometedores del pop psicodélico actual, capaces de transportar al oyente a un universo donde el pasado y el presente se funden en melodías cautivadoras.


Entre el jazz y las Islas Vírgenes: “Yesterday’s Today” de Wonderlost

Entre el jazz y las Islas Vírgenes: “Yesterday’s Today” de Wonderlost

Hay canciones que no buscan imponerse, sino acompañarte. Ese es el caso de Yesterday’s Today, la más reciente entrega de WONDERLOST, el proyecto encabezado por Jared Warren, tecladista de Mother Goat. En esta pieza, el ritmo tranquilo se entrelaza con una atmósfera chill que invita a bajar el ritmo y respirar un poco más profundo, sin necesidad de caer en la complacencia.

El tema se mueve con soltura entre arreglos suaves y un saxofón clásico que marca la pauta con elegancia. Hay un espíritu jazzístico que flota entre cada nota, pero también se siente la presencia de la psicodelia y ese sabor caribeño que emana de las Islas Vírgenes, lugar desde donde WONDERLOST viene cocinando su propuesta. La mezcla es sutil, sin sobresaltos, pero lo bastante viva como para mantener al oyente dentro del viaje.



Más que seguir una fórmula, WONDERLOST se permite experimentar desde lo emocional y lo sensorial. El tema transmite cierta nostalgia envuelta en una calma contagiosa, como si el pasado no doliera sino que se diluyera lentamente bajo el sol. No hay urgencia, no hay gritos, sólo un vaivén musical que se deja escuchar mientras el tiempo parece detenerse un poco.

Yesterday’s Today no pretende ser un hit, ni falta que le hace. Es una invitación a dejarse llevar por una fusión que no teme cruzar géneros ni fronteras. En un mundo saturado de inmediatez, esta canción propone algo más raro: una pausa.

Wombo y la realidad de Danger in Fives

Wombo y la realidad de Danger in Fives

En un panorama donde el indie pop suele transitar caminos conocidos, Wombo propone un desvío interesante con “Danger in Fives”. La banda de Louisville, Kentucky, construye esta canción como una especie de espejismo sonoro: familiar por momentos, pero siempre lista para escapar de cualquier encasillamiento. La estructura es libre, pero no caótica; lo suficiente para que uno se sienta envuelto sin saber del todo por qué.

La voz de su vocalista actúa como guía en este paisaje difuso. Su tono agudo y casi etéreo no se impone, más bien flota, dejando una estela que define el ambiente con sutileza. La atmósfera que logra no es casual, sino parte del ADN de un grupo que prefiere mirar el mundo a través de un prisma distinto, sin la necesidad de explicarlo todo.



Lo que en otras bandas sería un riesgo, en Wombo parece una decisión natural. Las influencias del pasado punk pop de sus integrantes no desaparecen del todo, pero aquí se diluyen en capas más suaves, más introspectivas. “Danger in Fives” no se apoya en un estribillo pegajoso, sino en una tensión controlada que se sostiene gracias al equilibrio entre voz, ritmo y espacio.

Este nuevo lanzamiento no busca grandes declaraciones. Más bien, se asienta como una pieza más del universo paralelo que Wombo ha venido construyendo desde sus inicios. Y en ese universo, las canciones no se explican: se sienten como breves visitas a un lugar que parece real, aunque uno no sepa del todo dónde está parado.


“Luces, Emoción, ¡Acción!: El Electro Pop Cinemático de Hanna Andréa y NUUD”

“Luces, Emoción, ¡Acción!: El Electro Pop Cinemático de Hanna Andréa y NUUD”

La artista noruego-estadounidense Hanna Andréa une fuerzas con el productor sueco NUUD para presentar una nueva versión de su emotiva balada Starlight, transformándola en una poderosa explosión electro-pop que brilla tanto en la pista de baile como en los momentos más introspectivos. “Starlight (NUUD Version)” es una reimaginación vibrante que mantiene intacta la carga emocional de la canción original, mientras le añade una producción energética y cinematográfica que eleva cada verso y cada estribillo a nuevas alturas.



Los sintetizadores brillantes y pulsantes marcan el ritmo de esta experiencia sonora, guiados por la voz de Hanna, que se despliega con intensidad y vulnerabilidad. Su interpretación es el alma de la canción: una mezcla de melancolía, esperanza y anhelo, que se siente tan personal como universal. La producción de NUUD aporta texturas dinámicas, drops electrizantes y un enfoque moderno que convierte Starlight en un himno listo para festivales, playlists y noches de verano.

Este encuentro entre la sensibilidad pop cinematográfica de Hanna y el enfoque pulido y emocional de NUUD da como resultado una colaboración impecable. La canción no solo logra conectar con quienes buscan letras con alma, sino también con los amantes de los ritmos bailables y envolventes. Perfecta para listas como Electro Pop Vibes, Dance Rising o Future Pop Gems, Starlight es un ejemplo del tipo de música que cruza fronteras, géneros y estados de ánimo.


Psicodelia entre hermanas: el viaje musical de “Cinnamon”

Psicodelia entre hermanas: el viaje musical de “Cinnamon”

Desde Los Ángeles llega Band of Muses, un proyecto gestado entre dos hermanas, Penny-Scarlett Muse y Daisy Rose Muse, que se abre paso con una primera entrega titulada “Cinnamon”. La canción, publicada en abril de 2025, propone un recorrido sensorial donde los ecos de la psicodelia clásica se combinan con una instrumentación que no teme explorar matices orientales. El resultado es una mezcla que remite a una época, pero que no busca imitarla, sino reinterpretarla desde una visión más íntima.

Las referencias son claras: Led Zeppelin, The Doors o Jefferson Airplane funcionan como pilares, pero lo interesante es cómo Band of Muses los filtra a través de su propio universo. En lo instrumental, Daisy Rose toma como guía la técnica de Eric Clapton, dando lugar a pasajes de guitarra que evitan el exceso y apuestan por la atmósfera. Por su parte, las letras de Penny-Scarlett reflejan una sensibilidad lírica que se nutre de figuras como Bob Dylan y Tori Amos, aportando un aire introspectivo sin caer en la pretensión.



“Cinnamon” no se presenta como una canción que busca complacer de inmediato, sino como una experiencia que se construye por capas. La voz, etérea y perfectamente integrada, guía la melodía entre sonidos envolventes y ligeros contrastes, aportando un carácter onírico que se mantiene firme a lo largo del tema. Hay una intención clara de jugar con el ritmo y el color, sin abandonar nunca la estructura de una canción pop bien contenida.

Aunque este es apenas su debut, Band of Muses deja claro que su propuesta no se limita al guiño nostálgico. Con nuevas canciones previstas para este 2025, el dúo parece tener claro hacia dónde quiere llevar su proyecto: un espacio donde lo clásico y lo personal se encuentren sin forzar la convivencia. “Cinnamon” es solo el inicio de ese camino, uno donde las influencias no pesan, sino que acompañan.


Das Kope derrite la realidad con “Melting Away”: psicodelia urbana bajo el sol de Los Ángeles

Das Kope derrite la realidad con “Melting Away”: psicodelia urbana bajo el sol de Los Ángeles

Con una identidad visual y sonora que parece salida de un sueño febril, Das Kope regresa con “Melting Away”, su nuevo sencillo lanzado el 7 de mayo de 2025. Este productor psicodélico, multiinstrumentista y artista visual brasileño radicado en Los Ángeles continúa expandiendo su universo lisérgico con una canción que se desliza entre la alucinación y la distorsión emocional.

Inspirado por una ola de calor californiana, Das Kope convierte esa sensación de sofoco existencial en una pieza de pop apocalíptico y vaporoso. “A veces la vida se siente como una larga caminata bajo el sol ardiente. No necesitas estar perdido en el desierto para empezar a ver espejismos”, comenta el artista. Ese sentimiento es palpable en cada nota del tema: sintetizadores derretidos, guitarras dilatadas y una voz que parece flotar sobre el asfalto caliente de una ciudad al borde del colapso.



El videoclip, animado por el propio Kope, refuerza esa estética de ensueño distorsionado. Fiel a su estilo DIY, el artista se encarga de todo: composición, producción y arte visual, creando una experiencia audiovisual inmersiva que combina referencias a la psicodelia de los 70 con una visión moderna y distópica del presente.

Después de haber girado por Norteamérica en 2022 y 2023, Das Kope pasó 2024 encerrado en su estudio, desconectado del ruido exterior, trabajando en lo que será su segundo álbum, previsto para finales del verano de 2025. “Melting Away” es el tercer adelanto de ese esperado trabajo, precedido por “Laying Low” y “We Must Be Out of Our Minds”, y confirma que estamos ante un artista que no teme desdibujar los límites entre lo musical, lo visual y lo sensorial.

Describiendo su estilo como “los Beach Boys atrapados en un episodio de Black Mirror”, Das Kope se consolida como una figura única en la escena psych-pop actual, alineado con artistas como Tame Impala, MGMT o Ariel Pink, pero con un sello profundamente personal. “Melting Away” no es solo una canción: es un estado mental.


Entre Astros y Acordes: La Cosmología Sonora de Vinyl Williams

Entre Astros y Acordes: La Cosmología Sonora de Vinyl Williams

Vinyl Williams, nombre artístico de Lionel Williams, es mucho más que un músico: es un creador de universos. Radicado en Los Ángeles, este artista multidisciplinario ha desarrollado una de las propuestas más singulares y expansivas del panorama psicodélico contemporáneo.

Su obra combina lo-fi y hi-fi, filosofía, geometría sagrada y espiritualidad cósmica, todo envuelto en un sonido que remite a la psicodelia de los años 70 pero con una visión futurista. Con influencias que van desde Van Dyke Parks y Todd Rundgren hasta Cindy Lee y Iasos, Vinyl Williams crea una alquimia sonora que resulta tan cerebral como emocional. Su música se mueve entre el pop cósmico, el ambient, el dream pop y el rock experimental, siempre con una estética que recuerda a un sueño lúcido o una utopía interestelar.

El próximo 13 de junio de 2025, lanzará Polyhaven / Portasymphony, un doble LP que reúne dos caras opuestas de su creatividad: una producción lo-fi e instrumental, y otra hi-fi más melódica y detallada. Ambos lados se presentarán en un vinilo doble tipo “gatefold”, con un holograma lenticular que cambia de imagen al moverlo, reflejando su pasión por lo sensorial y lo interactivo.



Dentro del álbum, destacan sencillos como “Find the Hidden” —acompañado por un video interactivo donde el espectador puede buscar objetos ocultos— y “Sunlight”, una pieza instrumental cálida y envolvente que evoca la sensación de quedarse dormido bajo el sol. Este tema demuestra que Vinyl Williams puede contar historias profundas sin necesidad de letras, usando únicamente la textura de sus sonidos y la riqueza de sus arreglos.

Más allá de la música, Lionel ha creado un concepto llamado “astrología musical”, una aplicación que convierte fechas y posiciones planetarias en notas musicales, reafirmando su obsesión por encontrar la armonía entre ciencia, arte y espiritualidad. Su obra invita a imaginar un futuro donde la música, la imagen y la conciencia convergen en una misma frecuencia.