Rafael Méndez

Perish debuta con “Cool Guys”: una travesía entre raíces rurales y concreto urbano

Perish debuta con “Cool Guys”: una travesía entre raíces rurales y concreto urbano

La historia de Perish no comienza en un estudio, sino en los pasillos de una iglesia en Brooklyn, donde Katie Callihan, una cantautora oriunda de Florida, se topó con tres músicos que terminarían convirtiéndose en su banda. El encuentro fue casual, parte de una rotación dominical de músicos, pero bastó una conversación y un par de demos para que la idea de grabar algo juntos empezara a tomar forma. Entre ensayos invernales en un pequeño cuarto y la energía cruda de tocar con frío en los huesos, nació algo más sólido que una colaboración momentánea.

Cool Guys, el sencillo debut, suena como ese trayecto entre lo conocido y lo incierto. La canción recoge la melancolía del indie folk con una base rock que no necesita imponerse, solo acompañar. Tiene una estructura sencilla, pero es ahí donde se cuela lo íntimo. Se puede notar que hay una historia personal detrás, aunque no se exponga del todo. Es un tema que no se apura en llegar a algún lado, sino que se deja llevar.



Grabado en Big Nice Studio, un espacio improvisado en un viejo almacén de Rhode Island, el EP fue moldeándose entre sesiones, descansos y patinetas. Lo curioso no está solo en cómo surgió la banda, sino en la forma en que su sonido captura tanto el aire rural de sus orígenes como las tensiones silenciosas de la vida urbana. Influencias como Sharon Van Etten o Adrianne Lenker aparecen como ecos lejanos, pero la voz de Callihan se abre camino con una claridad honesta, sin disfraces.

Con el EP completo programado para otoño bajo el sello Rue Defense, Cool Guys sirve como carta de presentación. No intenta resumirlo todo ni ser más de lo necesario. Es un vistazo a una banda que no busca impresionar de inmediato, sino conectar desde lo simple. En una escena saturada de producciones que buscan ser perfectas, Perish parece más interesado en mostrar lo que realmente hay, sin mucho filtro. Eso, en sí mismo, ya dice bastante.


Entre el insomnio y la distorsión: The Kerosene Hours regresa con “Who’s That in My Room?”

Entre el insomnio y la distorsión: The Kerosene Hours regresa con “Who’s That in My Room?”

En la delgada línea entre la realidad y el delirio nocturno aparece The Kerosene Hours, el proyecto alternativo de Aaron Silverstein, con su nueva entrega Who’s That in My Room?. Este tema se mueve entre la energía del punk, una atmósfera darkwave, sintetizadores envolventes y un coro que, sin buscarlo, se queda contigo. Hay algo familiar en su estructura, pero también una inquietud que empuja a volver a escuchar para confirmar si todo fue real o imaginado.

The Kerosene Hours no es solo un proyecto musical, es un manifiesto creativo nacido entre la medianoche y las cuatro de la mañana, esas horas turbias donde los colores se distorsionan y lo improbable toma forma. Silverstein inició esta exploración con el EP The King of Leaving en 2019 y no ha frenado desde entonces. Su obra no responde a una fórmula, sino que se ramifica en EPs, álbumes instrumentales y videoclips, como si cada lanzamiento fuese una cápsula de tiempo con preguntas incómodas y atmósferas densas.



Con el disco Fantasy Ultra (2022), Silverstein desnudó los absurdos del mundo suburbano a través de fantasías oscuras, una especie de diario sonoro y visual sobre lo que no se dice en voz alta. El EP Plagues of the Cinematic continuó esa línea, con pistas descartadas que no por ello carecían de intención. Luego vendría Sleepers I: Body in the House, una entrega instrumental que marcó el inicio de una trilogía que aún está en proceso, como un eco que se desplaza lento, pero firme.

Ahora, mientras se alista el lanzamiento de Happy We Try en 2025 y la presentación de su primer largometraje The Infinite Husk en SXSW, Silverstein nos ofrece esta canción como anticipo de lo que viene. Who’s That in My Room? no busca respuestas claras, más bien siembra dudas con una estética cruda pero controlada. Vale la pena entrar a este cuarto —aunque sea de madrugada— y escuchar qué se mueve en la sombra.


Bienvenido a la Nueva Ola #757 | Poster Girl, Bye Bye Bird y John Morrison

Bienvenido a la Nueva Ola #757 | Poster Girl, Bye Bye Bird y John Morrison

Si eres un apasionado de la música y estás siempre en busca de nuevos sonidos para enriquecer tu playlist, has llegado al lugar indicado. En esta ocasión continuamos con nuestra sección “Nueva Ola”, donde te sumergiremos en el emocionante mundo de los lanzamientos musicales de artistas emergentes de todo el planeta y el mar. Desde géneros clásicos reinventados hasta fusiones audaces y voces que te dejarán sin aliento, prepárate para descubrir una nueva dimensión de la música global.


Poster Girl | Black Overalls | Estados Unidos

Poster Girl debuta con Black Overalls, una canción indie rock que transmite la emoción ligera y algo juguetona de un primer encuentro. La voz femenina navega con soltura entre guitarras vibrantes y un ritmo que, sin ser acelerado, mantiene el movimiento. La canción invita a recordar momentos donde todo parecía encajar sin esfuerzo, como si la tarde no tuviera prisa por acabar.

Formada en 2023, Poster Girl toma referencias del alternativo noventero, pero sin quedarse anclada en el pasado. Su estilo mezcla riffs sucios con una distorsión que no abruma, sino que acompaña. La presencia vocal, suave pero segura, da estructura a composiciones que se sienten personales sin perder el impulso musical que las impulsa hacia adelante.


Bye Bye Bird | Suitcase | Suecia

Con Bye Bye Bird y su canción Suitcase, el enfoque cambia hacia algo más introspectivo. Este grupo de folk escandinavo fusiona la poesía sueca con un arreglo acústico que respira calma y cercanía. La voz tenor lleva la melodía con una claridad emocional que no necesita exagerar para conectar con quien escucha.

Fuera del escenario, Bye Bye Bird cultiva una estética nostálgica, incluso en detalles como seguir usando audífonos con cable envueltos en hilo. Esa imagen resume bien su propuesta: cercana, cuidada, sin pretensiones. En su música hay una mezcla entre lo antiguo y lo nuevo que no busca impresionar, sino acompañar.


John Morrison | Cherry Cola | Estados Unidos

John Morrison nos presenta Cherry Cola, una canción indie pop/rock con un ritmo que engancha desde el primer acorde. Las melodías invitan a tararear y están acompañadas de letras que hablan de la vida cotidiana con una mirada fresca. El resultado es una pieza que se puede escuchar sin distracciones, pero también encontrarle detalles si se presta atención.

Antes de lanzarse como músico, John Morrison trabajaba como abogado en Washington, D.C., y fue en el circuito de micrófono abierto donde comenzó a dar forma a su estilo. Su música combina instrumentos clásicos con producción actual, y en ese equilibrio logra una propuesta que se siente cercana y al mismo tiempo elaborada. Cherry Cola refleja justo eso: sencillez con intención.


Cada uno de estos proyectos ofrece una forma distinta de acercarse a lo musical, desde lo acústico y poético hasta lo pegajoso y directo. Ya sea que conectes con los riffs melancólicos de Poster Girl, la calidez artesanal de Bye Bye Bird o las melodías vibrantes de John Morrison, vale la pena darles una escucha y dejar que alguna de estas canciones se cuele en tu día.

Bienvenido a la Nueva Ola #756 | Teana, &Tilly y Casii Stephan

Bienvenido a la Nueva Ola #756 | Teana, &Tilly y Casii Stephan

Si eres un apasionado de la música y estás siempre en busca de nuevos sonidos para enriquecer tu playlist, has llegado al lugar indicado. En esta ocasión continuamos con nuestra sección “Nueva Ola”, donde te sumergiremos en el emocionante mundo de los lanzamientos musicales de artistas emergentes de todo el planeta y el mar. Desde géneros clásicos reinventados hasta fusiones audaces y voces que te dejarán sin aliento, prepárate para descubrir una nueva dimensión de la música global.


Teana – Sueño de Dia | España

Con una base de bajos profundos que marcan el ritmo desde el inicio, “Sueño de Día” de Teana se mueve con soltura entre influencias del indie pop moderno y atmósferas envolventes. La voz dinámica del proyecto le da textura a una propuesta que mezcla introspección y energía, todo bajo una estética moderna que no se siente forzada.

Tras sus primeros EP y colaboraciones destacadas, Teana presenta su primer álbum Sagrada Bendición, un trabajo completamente autoproducido que reflexiona sobre el equilibrio entre el ego y la identidad. Este nuevo material reafirma su apuesta por un sonido íntimo que, como en esta canción, se sostiene en la honestidad y en una exploración constante de su estilo musical.


&Tilly – At a Cost | Chequia

“At a Cost” es una canción que transita con calma pero sin perder el rumbo. Su instrumentación se apoya en una base acústica con toques sutiles que se entrelazan con una voz suave y casi etérea, generando un espacio apacible que atrapa sin necesidad de subir el volumen.

El proyecto &Tilly surgió del encuentro entre dos almas introspectivas que, desde sus propios finales, comenzaron a crear algo nuevo. Lo que empezó como un diálogo íntimo fue creciendo gracias a colaboraciones internacionales, manteniendo como centro la voz de Tilly, cuya presencia define gran parte de la identidad del proyecto.


Casii Stephan – King in America | Estados Unidos

Con una energía directa y una voz que impone desde el primer verso, “King in America” de Casii Stephan nos lanza de lleno a un territorio más explosivo. La canción combina fuerza y dirección, apoyándose en una base rock que deja espacio para el despliegue vocal sin sacrificar la estructura ni el impacto.

Originaria de Minnesota y ahora radicada en Tulsa, Casii ha recorrido un camino donde su voz ha pasado del silencio a ser su mayor herramienta. Desde 2016 viene construyendo un repertorio que mezcla soul, rock e indie con letras que se sostienen en la emoción y la determinación, como bien lo demuestra este último lanzamiento.


Cada una de estas propuestas trae consigo una manera distinta de entender el presente musical. Desde lo introspectivo hasta lo visceral, Teana, &Tilly y Casii Stephan ofrecen puntos de vista que merecen ser escuchados. Te invitamos a explorar sus canciones y dejar que sus sonidos se acomoden en tu playlist sin que tengas que forzarlo.


Big Society apuesta por la vulnerabilidad con su nuevo sencillo “Guarantee”

Big Society apuesta por la vulnerabilidad con su nuevo sencillo “Guarantee”

Desde su estudio improvisado en un contenedor en Pollard Yard, Big Society vuelve a hacer ruido con Guarantee, su más reciente sencillo que ya está disponible en todas las plataformas digitales desde este 11 de julio. Esta nueva entrega marca el tercer adelanto de su álbum debut y reafirma el enfoque melódico y crudo que distingue al trío originario de Manchester. Esta vez, sin embargo, se percibe un tono más pausado, más íntimo, que deja ver otra cara del grupo.

Con la mezcla de Matt Wiggins—ingeniero de artistas como Adele y Glass Animals—Guarantee suena nítida, cuidada, pero sin perder ese rasgo indie que los conecta con su audiencia. La voz tenor de Will Jacquet, quien además se encarga de la batería, guía con suavidad una letra que reflexiona sobre los riesgos emocionales y las decisiones inciertas que marcan la vida cotidiana. La producción no busca sobrecargar: permite que cada instrumento respire.



Los integrantes, que se conocieron estudiando en el Royal Northern College of Music Conservatoire, ya habían demostrado química en sus lanzamientos anteriores, pero en esta canción parece que se permiten bajar la guardia un poco más. Hay algo más contemplativo, más sencillo, que no por eso pierde fuerza. Thom Fripp y Harry Gummery acompañan con sutileza, dejando que la canción crezca sin prisa.

Tras su participación como teloneros en la gira europea de Luvcat, el grupo llega a este punto con una base sólida de oyentes y una dirección artística clara. Guarantee no busca impresionar con artificios: se enfoca en capturar ese momento justo entre la duda y la convicción. Un paso que, aunque tranquilo, suena firme.


Moon Panda y la fragilidad compartida en “Lost World”

Moon Panda y la fragilidad compartida en “Lost World”

En un rincón donde el dream pop se mezcla con lo introspectivo, Moon Panda lanza Lost World, una canción tranquila que flota entre atmósferas lofi y melodías suaves. La voz femenina guía el relato como si narrara un sueño a punto de deshacerse. El tema parte de una pregunta sencilla pero desgarradora: ¿qué pasa cuando la relación que sostenía todo empieza a tambalearse?

Compuesta por la californiana Maddy Myers y el danés Gustav Moltke, la pareja detrás de Moon Panda ha aprendido a no separar su vínculo personal de su música. Lost World es resultado de ese cruce inevitable entre lo íntimo y lo creativo. El bajo profundo y los arreglos delicados sostienen un relato de pérdida emocional que no necesita dramatismo para ser contundente.



La canción forma parte del universo que presentaron en el EP Make Well, donde exploran los momentos más vulnerables de su historia juntos. Pero aquí, el tono parece más introspectivo, más encerrado en la cabeza de quien ya no sabe si el futuro compartido sigue siendo posible. Hay una calma inquieta que recorre todo el tema, como si se caminara por un mundo conocido que ha comenzado a desmoronarse lentamente.

Lost World no pretende resolver el conflicto, ni señalar culpables. Es una canción que acepta la tristeza como parte del recorrido, como algo que también necesita su espacio para respirar. Y en esa aceptación, suena cercana, sincera y profundamente humana. Para quienes han sentido que el suelo conocido se vuelve extraño, esta canción puede ser un eco de consuelo.


Ryan Thomas pregunta lo inevitable en “Can We Start Again?”

Ryan Thomas pregunta lo inevitable en “Can We Start Again?”

Desde Western Sydney, Ryan Thomas da un nuevo paso con su canción Can We Start Again?, una pieza donde la guitarra no es solo acompañamiento, sino un personaje central que conduce toda la narrativa. Con una voz tenor que se mantiene firme sin ser impositiva, el tema plantea una pregunta sencilla pero cargada de historia: ¿podemos volver a empezar? A través de un ritmo atractivo, casi intuitivo, Ryan canaliza emociones reconocibles sin caer en el exceso.

Este nuevo sencillo refleja el trayecto de un músico que ha pasado por escenarios diversos: desde jams de blues hasta una banda de pop punk. Todo eso se escucha en los matices de Can We Start Again?, una canción que combina la crudeza del presente con ecos de influencias clásicas y modernas. La estructura es limpia, sin adornos superfluos, lo que permite que el foco esté en la guitarra y la letra.



Ryan Thomas, también conocido como “Tastee Licks”, no es ajeno a la introspección. Ya en su debut con Falling Back mostró una tendencia a convertir experiencias personales en reflexiones musicales. Aquí vuelve a hacerlo, pero con más soltura, como si la idea de recomenzar no viniera desde la desesperación, sino desde la calma de quien ha aprendido algo en el camino.

Can We Start Again? no impone respuestas ni fórmulas, solo lanza una pregunta que muchos han evitado hacer en voz alta. A través de una mezcla sutil de nostalgia y madurez, Ryan demuestra que a veces una guitarra y una voz clara bastan para generar conexión. Una canción para quienes alguna vez quisieron borrar lo dicho, pero también para quienes aprendieron a empezar desde lo que quedó.


Desde el encierro al despegue: “PROTOPIA” y la visión de Wasabi Club

Desde el encierro al despegue: “PROTOPIA” y la visión de Wasabi Club

En tiempos donde lo cotidiano se transformaba en incertidumbre, Wasabi Club encontró en el encierro creativo una vía de escape. Formado durante la pandemia en Gqeberha, Sudáfrica, el dúo compuesto por Rikalet y Matthew de Lange empezó a dar forma a un sonido que mezcla capas suaves de dreampop con una base de indie rock calmada pero firme. Su nuevo sencillo PROTOPIA parece consolidar esa búsqueda por una atmósfera que es tanto introspectiva como expansiva.

La voz femenina de Rikalet guía la canción con delicadeza, sin perder presencia. Entre sintetizadores envolventes, guitarras que rozan el shoegaze y una estructura medida, PROTOPIA crea una experiencia que invita más a sentir que a interpretar. El tema juega con la idea de un futuro posible, uno no idealizado, sino construido a partir de pequeñas resistencias emocionales.



Las influencias de bandas como Slowdive, Beach House o M83 se hacen notar, pero Wasabi Club logra imprimir un carácter propio a su propuesta. Hay una intención poética en la letra, que toma distancia de lo inmediato y se adentra en terrenos más reflexivos. La canción no acelera ni estalla, se mantiene en un punto medio donde lo emocional se construye desde la constancia, no desde el dramatismo.

PROTOPIA es una muestra del tipo de música que no exige atención, pero la retiene. Su textura calma, combinada con la profundidad de su mensaje, ofrece un lugar para detenerse y mirar hacia dentro. Para quienes buscan un respiro entre tanto ruido, este sencillo es una puerta abierta hacia un espacio distinto, donde lo sutil también puede ser poderoso.


Brent de la Cruz y el vaivén cotidiano en “Day To Day”

Brent de la Cruz y el vaivén cotidiano en “Day To Day”

En un contexto donde la música parece acelerarse al ritmo de las redes sociales, Brent de la Cruz propone algo distinto con su canción Day To Day. Desde San Diego y ahora afincado en Los Ángeles, este artista autodidacta apuesta por una mezcla de indie rock y pop con toques personales que se sienten cercanos, casi confesionales. Su voz tenor se desliza con naturalidad entre versos que retratan lo rutinario con una mirada introspectiva.

Day To Day no pretende romper moldes, pero sí apartarse de fórmulas prefabricadas. Hay una honestidad en su estructura, donde cada acorde y cada pausa parecen colocados con intención, sin adornos innecesarios. La influencia de artistas como Frank Ocean y MGMT se filtra sutilmente, no como copia, sino como rastro de una formación musical amplia que se expresa con claridad.



Desde sus primeros lanzamientos en 2019, Brent de la Cruz ha mantenido una trayectoria particular, sin campañas agresivas ni apoyos masivos. Su presencia en playlists editoriales fue ganada a pulso, y tras una pausa prolongada para trabajar en su sonido, regresa con una propuesta más afinada. Esta canción refleja ese proceso de maduración sin perder frescura ni espontaneidad.

Day To Day es una especie de diario musical donde lo simple cobra sentido. La rutina, los altibajos y ese deseo de seguir creando sin buscar validación inmediata son parte del mensaje que Brent parece transmitir. Escucharla es conectar con un momento que todos hemos vivido: ese día cualquiera que, sin ser especial, deja algo que se queda.


Harvey Brittain y la memoria del corazón: una primera escucha a “my heart keeps score”

Harvey Brittain y la memoria del corazón: una primera escucha a “my heart keeps score”

En un panorama musical saturado de fórmulas repetidas, Harvey Brittain parece no tener prisa por encajar. Su nueva canción my heart keeps score llega como una pieza que combina el pulso del rock con el refinamiento del pop moderno, guiada por una voz tenor que no teme mostrarse vulnerable. La batería, lejos de ser protagonista, aparece cuando debe, marcando pausas que dan aire a una historia personal sin buscar dramatismos excesivos.

Criado en Preston y ahora instalado en Los Ángeles, Harvey Brittain ha recorrido un camino inusual, desde sus primeras notas de jazz infantil hasta los escenarios de Nueva York. Este nuevo sencillo forma parte de su proyecto debut, una recopilación que mezcla momentos íntimos con sonidos que beben tanto del indie británico como del pop introspectivo actual. Aquí, la nostalgia no es solo un recurso, sino parte de la estructura emocional que sostiene la canción.



my heart keeps score no busca impactar con fuegos artificiales ni estrofas pretenciosas. Su fuerza está en lo que deja fuera, en la contención, en esa batería que entra cuando debe y en una melodía que se sostiene con lo justo. La producción, cálida pero precisa, acompaña sin robarle protagonismo a una letra que parece escrita tras una noche larga o una conversación sincera con uno mismo.

Con solo 23 años, Harvey Brittain no pretende tener todas las respuestas, pero ya tiene claro qué quiere contar y cómo quiere que se escuche. Esta canción es una muestra de eso, de alguien que entiende la música como un puente más que como una plataforma. Escucharla es como abrir una libreta de apuntes emocionales, en la que cada verso es una marca que quedó, y cada pausa, una forma de seguir adelante.