Pop Rock

Ryan Thomas pregunta lo inevitable en “Can We Start Again?”

Ryan Thomas pregunta lo inevitable en “Can We Start Again?”

Desde Western Sydney, Ryan Thomas da un nuevo paso con su canción Can We Start Again?, una pieza donde la guitarra no es solo acompañamiento, sino un personaje central que conduce toda la narrativa. Con una voz tenor que se mantiene firme sin ser impositiva, el tema plantea una pregunta sencilla pero cargada de historia: ¿podemos volver a empezar? A través de un ritmo atractivo, casi intuitivo, Ryan canaliza emociones reconocibles sin caer en el exceso.

Este nuevo sencillo refleja el trayecto de un músico que ha pasado por escenarios diversos: desde jams de blues hasta una banda de pop punk. Todo eso se escucha en los matices de Can We Start Again?, una canción que combina la crudeza del presente con ecos de influencias clásicas y modernas. La estructura es limpia, sin adornos superfluos, lo que permite que el foco esté en la guitarra y la letra.



Ryan Thomas, también conocido como “Tastee Licks”, no es ajeno a la introspección. Ya en su debut con Falling Back mostró una tendencia a convertir experiencias personales en reflexiones musicales. Aquí vuelve a hacerlo, pero con más soltura, como si la idea de recomenzar no viniera desde la desesperación, sino desde la calma de quien ha aprendido algo en el camino.

Can We Start Again? no impone respuestas ni fórmulas, solo lanza una pregunta que muchos han evitado hacer en voz alta. A través de una mezcla sutil de nostalgia y madurez, Ryan demuestra que a veces una guitarra y una voz clara bastan para generar conexión. Una canción para quienes alguna vez quisieron borrar lo dicho, pero también para quienes aprendieron a empezar desde lo que quedó.


Harvey Brittain y la memoria del corazón: una primera escucha a “my heart keeps score”

Harvey Brittain y la memoria del corazón: una primera escucha a “my heart keeps score”

En un panorama musical saturado de fórmulas repetidas, Harvey Brittain parece no tener prisa por encajar. Su nueva canción my heart keeps score llega como una pieza que combina el pulso del rock con el refinamiento del pop moderno, guiada por una voz tenor que no teme mostrarse vulnerable. La batería, lejos de ser protagonista, aparece cuando debe, marcando pausas que dan aire a una historia personal sin buscar dramatismos excesivos.

Criado en Preston y ahora instalado en Los Ángeles, Harvey Brittain ha recorrido un camino inusual, desde sus primeras notas de jazz infantil hasta los escenarios de Nueva York. Este nuevo sencillo forma parte de su proyecto debut, una recopilación que mezcla momentos íntimos con sonidos que beben tanto del indie británico como del pop introspectivo actual. Aquí, la nostalgia no es solo un recurso, sino parte de la estructura emocional que sostiene la canción.



my heart keeps score no busca impactar con fuegos artificiales ni estrofas pretenciosas. Su fuerza está en lo que deja fuera, en la contención, en esa batería que entra cuando debe y en una melodía que se sostiene con lo justo. La producción, cálida pero precisa, acompaña sin robarle protagonismo a una letra que parece escrita tras una noche larga o una conversación sincera con uno mismo.

Con solo 23 años, Harvey Brittain no pretende tener todas las respuestas, pero ya tiene claro qué quiere contar y cómo quiere que se escuche. Esta canción es una muestra de eso, de alguien que entiende la música como un puente más que como una plataforma. Escucharla es como abrir una libreta de apuntes emocionales, en la que cada verso es una marca que quedó, y cada pausa, una forma de seguir adelante.


Nadia Vaeh: La reina del “poptimistic-rock”

Nadia Vaeh: La reina del “poptimistic-rock”

Nadia Vaeh ha llegado con pop-rock y letras conscientes con una actitud sin filtros. Originaria de Atlanta, esta artista se ha ganado la atención con su estilo denomina “poptimistic-rock” — una mezcla de pop optimista con rock enérgico y mensajes profundos.

Desde sus inicios, Nadia ha sabido conectar con su audiencia no solo por su talento vocal, sino también por la sinceridad y la valentía de sus letras. Su música aborda temas como la salud mental, las relaciones tóxicas y los altibajos de la vida, invitando a sus seguidores a abrazar tanto la luz como la oscuridad que todos llevamos dentro. Esta sensibilidad nace de una experiencia personal dolorosa: la pérdida de su madre por suicidio cuando ella tenía apenas 17 años. Esa tragedia ha marcado su vida y su arte, impulsándola a usar su plataforma para crear conciencia y apoyar la desestigmatización de la salud mental.



En esta ocasión la artista regresa con un nuevo sencillo: “I Think I Think Too Much”, un tema cargado de honestidad y energía que se convierte en un himno para todos aquellos que luchan con la ansiedad y el exceso de pensamientos.

Desde su inicio, la canción atrapa con una melodía acústica suave y una voz cargada de vulnerabilidad. Nadia aborda un tema muy cercano para muchas personas hoy en día: el desafío de manejar la salud mental, y la frustración que puede generar cuando las soluciones parecen no funcionar. Este mensaje tan honesto y real conecta profundamente con las generaciones jóvenes, quienes constantemente lidian con ese torbellino emocional que a veces parece no tener fin.

Al llegar al coro, la canción da un giro hacia un ritmo más enérgico y optimista, con un beat pegajoso que invita a moverse y liberarse. La combinación de letras introspectivas con una producción pop-rock vibrante crea un contraste cautivador que invita a aceptar y compartir esas emociones complejas, en lugar de esconderlas.

Este sencillo es el primer adelanto del próximo EP de Nadia, Nerve Endings, un proyecto que promete profundizar en temas como el trauma, la resiliencia y la sanación desde una perspectiva sincera y sin filtros. Con esta canción, Nadia Vaeh reafirma su lugar como una voz relevante y auténtica dentro del pop alternativo, capaz de crear espacios seguros a través de su música para quienes se sienten perdidos o abrumados.


Sam Varga: El fin del mundo nunca sonó tan íntimo

Sam Varga: El fin del mundo nunca sonó tan íntimo

En tiempos donde la incertidumbre parece una constante y lo político se entrelaza con lo personal, Sam Varga con base en Nashville pero raíces en Louisville, Kentucky, Varga ha logrado fusionar la crudeza del emo, la narrativa del folk sureño y la energía visceral del pop punk en un sonido que es tan emocional como explosivo.

Su más reciente sencillo, “Minute Man”, muestra el caos contemporáneo para ser transformardo en una canción que suena a despedida, a protesta… y también a historia de amor. “Me prometí no escribir nunca una canción política”, confiesa Varga. Pero en este track no hay forma de separar lo político de lo íntimo. Es una postal desde el borde del colapso, firmada con amor y encendida como una bengala.



Con guitarras crujientes, percusiones potentes y una letra cargada de simbolismo, “Minute Man” no ofrece respuestas, pero sí muchas preguntas. Varga lo describe como una especie de prueba de Rorschach sonora: “Lo que ames —o detestes— de esta canción probablemente diga más de ti que de mí”. No hay juicios, no hay bandos, solo una atmósfera densa en la que cada oyente puede proyectar sus propias ansiedades, esperanzas o frustraciones.

La historia de Varga comienza en la escena DIY emo de Louisville, donde se formó entre shows en sótanos, guitarras fuertes y noches desbordadas. Pero en casa, sus padres le inculcaron un amor por el rock de los 80, los clásicos del sur de EE.UU. y los grandes letristas. Ese cruce generacional y emocional es la base de su sonido: una mezcla de vulnerabilidad, urgencia y autenticidad que no sigue reglas ni etiquetas.

Con “Minute Man”, Sam lleva su propuesta más cruda, más cinematográfica, más directa. Es la banda sonora perfecta para una generación que se siente agotada por el ruido del mundo.


Vampiros y guitarras: el peculiar universo de “Twos” de The Noisy

Vampiros y guitarras: el peculiar universo de “Twos” de The Noisy

Desde el corazón alternativo de Filadelfia, The Noisy presenta Twos, una pieza que no pide permiso para combinar guitarras tranquilas con sintetizadores brillantes y una estética sacada de un cine mudo empapado en sombra queer. El ritmo relajado de la canción no impide que se sienta cargada de intención, como si cada acorde fuera parte de un plan más grande: seducir al oyente sin levantar la voz. Y en el fondo, ahí está esa guitarra eléctrica clásica, siguiéndole el paso a la voz como si no quisiera separarse de ella.

El videoclip que acompaña a Twos, dirigido por Sam Cush, es un espectáculo aparte. Drag, maquillaje vampírico y efectos prácticos crean una atmósfera de cabaret gótico, con Miss Thing como protagonista de una especie de película de medianoche que mezcla el glamour con la sátira visual. Hay algo de Buffy, algo de Grey Gardens, y una pizca de baile escolar que no termina bien. El resultado no pretende complacer a todos: simplemente existe, como una declaración escénica de exceso y teatralidad.



Detrás de la propuesta está Sara Mae Henke, poeta de Knoxville y mente que dio vida al proyecto The Noisy antes de que se convirtiera en banda. Lo que empezó como una idea solitaria ahora es colectivo queer con un sonido definido por contrastes: teclas que brillan y guitarras que arrastran. En 2023, su álbum debut The Secret Ingredient is More Meat fue financiado por su comunidad mediante ventas, rifas y conciertos; una forma directa y transparente de construir algo desde cero.

Ahora, con el respaldo del sello Audio Antihero, anuncian una edición especial de su debut: The Secret Ingredient is Even More Meat, donde Twos sirve como adelanto. Más que un sencillo, es un recordatorio de que el pop también puede ser silencioso, extraño y lleno de maquillaje. Que una canción puede caminar lento y aún así dejar huella. Que lo queer, lo camp y lo introspectivo no son opuestos, sino ingredientes en la misma receta.


Ocean Tisdall: Una voz irlandesa que regresa con honestidad y vulnerabilidad

Ocean Tisdall: Una voz irlandesa que regresa con honestidad y vulnerabilidad

Ocean Tisdall, artista de alt-pop originario de Manor Kilbride, Irlanda, regresa con una propuesta más íntima y sincera en su nuevo sencillo “Sugar in His Tea”, lanzado el 19 de junio. Después de un periodo alejado del foco mediático, Ocean se ha reencontrado con su pasión por contar historias a través de la música, entregando una obra que destila emoción cruda y vulnerabilidad sin filtros.

Desde muy joven, Ocean mostró inclinaciones musicales, influenciado por su madre, la cultura pop, el country y la narración de historias. Su trayectoria comenzó a tomar forma cuando formó parte de la banda United Vibe, con la que trabajó junto a Robbie Williams tras su paso por The X Factor UK. En 2022, inició su carrera como solista, con singles como “White Lies” y el EP Boys Don’t Cry, que incluye temas con gran resonancia como “Crying Room”, acumulando casi medio millón de streams en Spotify.



“Sugar in His Tea” es una canción que nace del dolor de un amor que se desvanece y la incertidumbre de la distancia emocional. En sus letras, Ocean narra la experiencia de una ruptura y la sensación de ver cómo su ex pareja avanza con alguien más, mientras él aún guarda ese cariño y los detalles que solo el tiempo y la convivencia revelan. La canción destaca por su minimalismo acústico: la voz profunda y conmovedora de Ocean se acompaña principalmente de piano y guitarra, construyendo una atmósfera íntima que invita a la reflexión.

Este nuevo lanzamiento muestra un Ocean Tisdall maduro, capaz de transformar el sufrimiento personal en una expresión artística que toca temas como el amor, la pérdida y la búsqueda de uno mismo. Con “Sugar in His Tea”, Ocean Tisdall también abre una nueva etapa en su carrera donde la transparencia y la conexión emocional son protagonistas.


Cuando el latin rock y pop se toman de la mano en “Muñeca”

Cuando el latin rock y pop se toman de la mano en “Muñeca”

Muñeca irrumpe con un pulso acelerado que no da tregua: rock alternativo latino con un guiño claro al pop de los 80’s y 90’s en América. Desde el arranque, el tema se mueve ágil entre cambios de ritmo que funcionan como giros inesperados en una ruta sonora. El resultado es una canción que despierta atención sin necesidad grandes complejidades, invitando al baile desde el inicio de la canción.

La fusión que propone Daglio se apoya en influencias de Soda Stereo, Los Fabulosos Cadillacs y Café Tacvba, pero refresca el legado con modernidad. La voz de Alberto Daglio, expresiva y bien modulada, aporta la chispa necesaria para transmitir esa alegría contenida.



Tras sus éxitos en El Salvador con Ultravioleta y su evolución hacia un electro-pop retro en Cincinnati, Daglio ha mostrado capacidad de reinventarse. La formación actual —con Cesar Vanegas Jr., Brandon Spradlin y Mark Becknell— nutre la propuesta con frescura y cierta irreverencia. Muñeca se suma a una serie de lanzamientos que demuestran su empeño por no quedarse en el pasado, sino por seguir conectando con nuevas audiencias.

En definitiva, Muñeca es una muestra de cómo el rock latino puede sonar ligero y actual sin perder su energía elemental. La canción se perfila como un giro delicioso dentro del catálogo de Daglio, ideal para quienes buscan un ritmo ágil y una atmósfera que conjuga tradición y renovación. Un tema que se disfruta tanto en la primera escucha como en las que siguen.


Youth Sector: energía, crítica social y pop angular desde Brighton

Youth Sector: energía, crítica social y pop angular desde Brighton

Desde la efervescente ciudad costera de Brighton, emerge una propuesta emocionante de indie-rock británico: Youth Sector. Este quinteto combina la precisión rítmica de Talking Heads, la estética art-rock de DEVO y un impulso que los sitúa como agitadores sonoros de una generación atrapada entre la ansiedad, el desencanto y la necesidad urgente de cambio.

Su música no —es política, sarcástica y desafiante—, pero siempre con una sonrisa torcida y un coro que no puedes dejar de cantar. A lo largo de sus EPs, Youth Sector ha demostrado convertir el descontento social y la alienación moderna en himnos bailables que explotan en energía, ironía y claridad melódica.



El próximo 19 de septiembre, el grupo lanza su álbum debut, Pop Couture, producido y mezclado por Richard Wilkinson (Bombay Bicycle Club, Spector, Kaiser Chiefs), este trabajo representa el esfuerzo más ambicioso de la banda hasta la fecha. Las letras abordan temas como la cultura del fraude, la corrupción política, la crisis del costo de vida y el desgaste emocional del día a día, todo envuelto en grooves infecciosos, sintetizadores vibrantes y riffs angulosos.

Su nuevo sencillo, “Break Something”, es una muestra clara de su evolución: un llamado a la acción que convierte la frustración en catarsis, con una producción expansiva y un espíritu combativo. Según el vocalista Nick Tompkins, la canción es un recordatorio de que tener opiniones firmes está bien, pero lo verdaderamente importante es mantenerse firme en ellas, incluso cuando resulta incómodo.Su estilo, que algunos definen como “pop político con esteroides”, se caracteriza por baterías propulsivas, bajos hiperactivos y arreglos que combinan el sarcasmo con una estética pop muy cuidada. Es como si los riffs post-punk se hubieran criado con memes, redes sociales y crisis existenciales.


Morningless: la sensibilidad indie-pop que nació de un sueño adolescente y florece en la madurez

Morningless: la sensibilidad indie-pop que nació de un sueño adolescente y florece en la madurez

En un rincón tranquilo de Suiza, entre melodías nostálgicas y letras introspectivas, nació Morningless, el proyecto musical del artista italo-suizo Alessandro, cuyo recorrido creativo es tan honesto como conmovedor. Lo que comenzó como un pasatiempo de juventud —componer temas MIDI por diversión en 1998— fue tomando forma hasta convertirse en un proyecto prometedor.

Alessandro fundó Morningless junto a su primo Marco, guitarrista y saxofonista, a finales de los años 90. Ambos compartían tardes de experimentación y amor por la música mientras estudiaban en la EJMA (École de Jazz et de Musique Actuelle) de Lausana. Con la posterior incorporación de la cantante Pauline, el proyecto adquirió profundidad vocal y una fuerte sensibilidad melódica.



Sin embargo, como ocurre con muchas bandas emergentes, la vida los llevó por distintos caminos. Fue en 2005, tras conocer a su esposa Jasmine y más adelante convertirse en padre de Niccolò, que Alessandro encontró una nueva fuente de inspiración que lo impulsó a retomar su música con renovada pasión y propósito. “Morningless” se convirtió entonces no solo en un proyecto artístico, sino en una carta de amor a su familia.



El álbum debut, iniciado en 2007 y finalmente completado en 2019, fue el resultado de años de crecimiento personal, aprendizaje y reflexión. En 2021, Morningless lanzó su segundo disco, «Planets», que marcó una evolución sonora incorporando elementos del rock alternativo, el pop atmosférico y sonidos experimentales.

Ahora, Alessandro se prepara para su obra más ambiciosa: el álbum doble conceptual «Two Birds Singing Lullabies», previsto para julio de 2025. Esta producción promete ser una meditación profunda sobre el amor, el paso del tiempo, la paternidad, la memoria y los pequeños gestos que salvan el alma.



Morningless combina influencias del indie pop, el rock psicodélico y el folk alternativo para crear paisajes sonoros honestos y reconfortantes. La voz de Alessandro, cálida y contenida, tiene el poder de abrazar al oyente. Su narrativa mezcla referencias culturales contemporáneas —como videojuegos o la vida moderna— con emociones universales como la ansiedad, la melancolía o el deseo de cambio.

El nombre del proyecto —Morningless— nace de una confesión simple: Alessandro odiaba despertarse temprano. Pero en esa frase aparentemente banal se esconde una filosofía: crear un mundo alternativo donde no existen las prisas, donde el tiempo se detiene para escuchar, sentir y sanar. Y eso es justo lo que logra su música.



Morningless ofrece una pausa, un respiro, una canción de cuna para el alma adulta. Es la música perfecta para una noche de reflexión, un viaje en tren, una tarde de lluvia o ese momento en que necesitas que alguien, aunque sea en voz baja, te diga: “todo estará bien”.


Sarina: La voz emergente del pop-rock tokioense que conquista con honestidad y energía

Sarina: La voz emergente del pop-rock tokioense que conquista con honestidad y energía

Sarina, cantante y compositora nacida y criada en Tokio, es una de las artistas más prometedoras de la escena pop-rock contemporánea. Con una mezcla única de influencias que van desde el pop-punk de los años 2010 hasta el indie pop actual, Sarina ha sabido crear un sonido propio que conecta de inmediato con una audiencia global, gracias a su sinceridad lírica y la fuerza emocional de su voz.

Con raíces multiculturales —hija de madre libanesa y padre japonés, y criada en Hawái—, Sarina aporta a su música una sensibilidad diversa y fresca que se refleja en cada canción. Desde muy joven mostró un talento natural para la música, tocando varios instrumentos y desarrollando habilidades creativas que la llevaron a firmar con el sello Sony RED. Bajo esta etiqueta lanzó seis sencillos, un EP titulado Foreword y produjo seis videos musicales que ella misma conceptualizó y dirigió, demostrando su compromiso artístico y visión integral.



Su más reciente sencillo, Race with no end, producido por Kevin Thrasher (conocido por su trabajo con Panic! At The Disco y Avril Lavigne), es un himno inspirador que habla sobre la lucha constante por mantenerse fiel a uno mismo en un mundo lleno de juicios y comparaciones. La canción combina una melodía pop-rock contagiosa con letras introspectivas que invitan a la perseverancia y a la esperanza, destacando la voz poderosa y emotiva de Sarina.

El video animado que acompaña el lanzamiento visualiza la narrativa de la canción, aportando una dimensión simbólica que enriquece la experiencia auditiva y visual. Con planes para seguir creciendo y expandiendo su influencia en la escena musical occidental, Sarina representa una fresca y valiente propuesta dentro del pop-rock actual, donde la autenticidad y la pasión son sus mayores fortalezas. Su música es un llamado a no rendirse, a correr esa “carrera sin fin” con el corazón encendido y la mirada firme hacia adelante. Sin duda, Sarina es una artista a seguir muy de cerca.