Rock

Rockvyn y la energía de “Different Different But Same”

Rockvyn y la energía de “Different Different But Same”

El proyecto musical Rockvyn, liderado por el compositor y productor alemán Patrick Schmitt, se ha convertido en una propuesta singular dentro de la escena del rock clásico contemporáneo. Su formación científica y su experiencia en biología molecular parecen trasladarse a la música, donde la precisión se combina con la intuición. En este cruce de caminos surge una identidad que mezcla el espíritu rebelde de los años sesenta con la potencia de la producción moderna, dando lugar a un sonido que se siente tanto vintage como actual.

Dentro de este marco aparece “Different Different But Same”, una canción que se distingue por su dinamismo. La pieza se construye sobre una base que combina country, blues y tintes de rock, logrando un equilibrio que evita caer en fórmulas repetitivas. La voz de Schmitt, bajo el nombre de Rockvyn, actúa como un hilo conductor que refuerza la cohesión de estilos y aporta un carácter propio a la interpretación.



El recorrido académico y musical de Schmitt explica en parte esta capacidad de síntesis. Educado en instituciones como Stanford y MIT, su perfil científico contrasta con su formación temprana en guitarra y piano. Esa dualidad se refleja en la manera en que Rockvyn diseña sus canciones: estructuras cuidadas, atmósferas envolventes y un enfoque que no se limita a reproducir el pasado, sino que lo reinterpreta con un lenguaje contemporáneo.

Al escuchar “Different Different But Same”, se percibe una propuesta que busca conectar con distintas sensibilidades. No se trata de un ejercicio de nostalgia, sino de una exploración que combina géneros para ofrecer un sonido versátil. En este sentido, Rockvyn se posiciona como un artista que entiende el rock no solo como herencia, sino como un espacio abierto a la experimentación, donde cada nota es parte de un diálogo entre tradición y modernidad.


Bad & The Ugly y el eco sombrío de “Something in the Way”

Bad & The Ugly y el eco sombrío de “Something in the Way”

El músico Nate Hess, bajo el nombre de Bad & The Ugly, ha construido un espacio sonoro que se aparta de lo convencional. Su propuesta se nutre de influencias como Andy Shauf y City and Colour, pero se distingue por un tono acústico más oscuro y envolvente. Con dos EPs autoeditados, Skin and Bones y Slept in the Pages, Hess ha logrado captar la atención de audiencias nacionales e internacionales, mostrando que su tránsito del hardcore hacia un folk cargado de sombras no es un accidente, sino una evolución consciente.

En este contexto aparece su versión de “Something in the Way (Nirvana Cover)”, una interpretación que no busca replicar la crudeza original de Nirvana, sino dialogar con ella. La canción conserva el aura misteriosa y los tintes oscuros que la hicieron emblemática, pero se filtra a través de la sensibilidad acústica de Hess. El resultado es un contraste entre lo áspero y lo íntimo, donde las armonías fantasmales refuerzan la sensación de un rock desnudo, sin adornos, pero con matices propios.



La trayectoria de Bad & The Ugly respalda esta lectura. Haber compartido escenario con artistas como Kevin Devine o Dan Andriano le ha permitido consolidar un estilo que se sostiene en la honestidad lírica y en un sonido que evita caer en clichés regionales. Su música parece surgir de un lugar indeterminado, como si el viento la arrastrara desde un paisaje desolado, y esa cualidad se refleja con claridad en su acercamiento a la obra de Nirvana.

Al escuchar “Something in the Way (Nirvana Cover)”, se percibe un diálogo entre pasado y presente. No se trata de un homenaje complaciente, sino de una reinterpretación que expone la esencia cruda del tema y la coloca en un terreno distinto. Hess logra que la canción se escuche como un eco que viaja por un cañón sonoro, donde cada silencio pesa tanto como cada nota. Es ahí donde Bad & The Ugly reafirma su identidad: un músico que transforma la herencia del rock en un paisaje acústico sombrío, sin perder la honestidad de su voz.


So Good: La irreverencia británica que reinventa el pop-punk navideño

So Good: La irreverencia británica que reinventa el pop-punk navideño

Desde el Reino Unido llega So Good, un proyecto musical que combina irreverencia, actitud punk y un humor filoso, construyendo un universo sonoro propio donde lo teatral y lo juvenil se entrelazan con la sensibilidad pop. Con una estética marcada por el espíritu Princess Punk, la artista desafía las convenciones del rock británico tradicional y ofrece una propuesta contemporánea audaz y desenfadada.



Su más reciente sencillo, Give Me My Presents, es un himno pop-punk navideño que rompe con la solemnidad de las fiestas. La canción narra, con sarcasmo y rebeldía, la perspectiva de una joven harta del consumismo, la hipocresía familiar y las tradiciones navideñas, exigiendo regalos sin filtros y burlándose de situaciones como la abuela borracha, todo con un toque de humor adolescente que conecta con el oyente.

Tras haber realizado giras europeas junto a Skunk Anansie y Queens of the Stone Age, y con presentaciones en festivales como In The City (Leeds), Airwaves (Islandia) y diversos escenarios del Reino Unido, So Good se reafirma su personalidad feroz, provocadora y divertida.


“One Of Us Now” y la Maquinaria de Cold Engines

“One Of Us Now” y la Maquinaria de Cold Engines

Desde la costa norte de Boston, el proyecto Cold Engines surge como una respuesta creativa ante la inactividad. Fundado en 2015 sobre las cenizas de The Brew por David Drouin y Aaron Zaroulis, el grupo se ha establecido como una maquinaria de gira prolífica. Con nueve álbumes en su haber y más de 140 presentaciones anuales, han compartido escenario con veteranos como Los Lobos y Blues Traveler, demostrando un oficio que solo se gana con la constancia de la carretera.

Su propuesta sonora busca capturar la urgencia de la era dorada del pop, citando a The Police y Queen como referencias directas. Sin embargo, en su canción One Of Us Now, la banda opta por un enfoque diferente que resalta su capacidad de matiz. La pieza presenta un ritmo lento pero sumamente cuidado, construyendo una estética hermosa que se aleja de la velocidad para centrarse en la textura y la atmósfera general de la composición.



La canción se nutre de claras influencias rock, adornadas con brillos nostálgicos gracias a unas tendencias retro que encajan con total naturalidad. Sobre esta base instrumental, la voz se despliega de manera cálida y expresiva, dotando al tema de una humanidad palpable. One Of Us Now funciona como un respiro melódico dentro de su catálogo, ofreciendo una experiencia auditiva que privilegia la expresividad sobre el gancho inmediato.

Este nivel de ejecución les ha valido el reconocimiento como “Banda de Rock del Año” en los New England Music Awards. Con la incorporación de músicos de peso de la escena de Boston, Cold Engines ha evolucionado hacia una fuerza de power pop sin disculpas. Trabajos ambiciosos como “Gargantua” demuestran que, tras años de trayectoria, el grupo sigue explorando profundidades cinemáticas y emocionales en su sonido con resultados sólidos.


Baby Condor y el Sonido de un Verano Perdido

Baby Condor y el Sonido de un Verano Perdido

El proyecto Baby Condor es una invitación a un viaje sonoro muy específico. Los hermanos Nolle y Beinte Groen proponen una estética que evoca las carreteras americanas, el asfalto bajo el sol y las tardes de verano en Laurel Canyon. Su música no busca la inmediatez, sino crear un “mundo perdido” de cinco minutos, un vehículo para soñar o reflexionar.

Su canción Seventeen es un buen ejemplo de esta visión. La pieza combina elementos de country, folk y rock en una atmósfera que resulta accesible y cuidada. Es una propuesta donde la voz es fundamental, aportando una personalidad distintiva que define el carácter del tema y guía la instrumentación que la acompaña.



La textura de Seventeen se alinea con el método de trabajo de los hermanos. Utilizan instrumentación análoga y arreglos armoniosos como su principal medio de transporte sonoro. El resultado es una composición que, fiel a su objetivo, invita a la introspección o a la evasión, dependiendo de la disposición del oyente.

Aunque Baby Condor se describe a sí mismo como un proyecto libre de géneros, su identidad es claramente reconocible. Esa identidad reside en sus melodías sólidas y en sus letras narrativas. Seventeen es una muestra de un proyecto que valora la composición y la atmósfera por encima de las etiquetas predefinidas.


Kat Velasco: Del Teatro al Country Pop

Kat Velasco: Del Teatro al Country Pop

El traslado de Carolina del Sur a Nashville suele implicar una búsqueda de raíces, y en el caso de Kat Velasco, ese origen proviene del teatro musical. Esta formación es la base desde la cual comenzó a lanzar su propia música en 2021, desarrollando un sonido que se describe como distintivo y con vocales apasionadas, ganando un espacio en la competida escena de la ciudad.

Su canción Show Pony es un buen ejemplo de su enfoque actual. La pieza se construye sobre una mezcla de influencias de rock , pop y un toque de country, sin depender de arreglos demasiado complejos. Es una propuesta donde el ritmo, aunque sencillo, logra ser atrapante y sirve como un vehículo eficaz para la narrativa de la composición.



Este enfoque le ha permitido a Kat Velasco ganar terreno de manera constante. Su sencillo “Leave Me Wild” la posicionó en listas clave de Spotify, mientras que el video de “Call Me” logró rotación en CMT. Este reconocimiento se ha mantenido con menciones de medios notables como CMA y Wide Open Country para sus trabajos posteriores.

Su validación no es solo digital; su experiencia se consolida en el escenario, habiendo abierto para artistas como BRELAND y David Nail. Es allí donde su sonido, definido como edgy, demuestra su lugar en la industria. Show Pony es un paso más en esa trayectoria que se aleja del teatro para afianzarse en el rock.


Hotel Mira y la Furia de “Don’t Break My Heart”

Hotel Mira y la Furia de “Don’t Break My Heart”

El colectivo de rock alternativo Hotel Mira, originario de Vancouver, opera bajo una premisa fundamental: la narración de historias. Este enfoque es impulsado por su carismático líder y compositor, Charlie Kerr. Su experiencia no se limita a la música; su trasfondo como actor y dramaturgo informa la composición de la banda, tratando toda expresión como un acto de narrar.

Esta filosofía se traduce en canciones como Don’t Break My Heart. La pieza es una representación precisa de su sonido, presentando un ritmo que es a la vez dinámico y explosivo. Es el tipo de energía que define al indie rock en su forma más directa, sirviendo como una sólida carta de presentación de la banda.



La intensidad de la canción cobra sentido al observar la presencia escénica de Kerr, descrita como una mezcla de Iggy Pop y teatro experimental. Su interpretación busca activamente romper la cuarta pared. Utiliza sus letras y melodías ondulantes para crear una conexión atenta con cada miembro del público.

Kerr no está solo en esta misión. El resto de Hotel Mira —Clark Grieve, Mike Noble y Cole George— proporcionan el paisaje sonoro. Es esta instrumentación la que permite que la pasión y el melodrama de cada canción envuelvan al oyente, completando la visión teatral del grupo.


ST. IVES y la Textura de “Tried You On”

ST. IVES y la Textura de “Tried You On”

El proyecto ST. IVES nace de una colaboración entre la vocalista Anna O’Neil y el productor Arik Blum. Su unión no es casual; surge en un momento de agitación personal y de una afinidad compartida por los sonidos graves del Reino Unido de mediados de los 90. Este contexto de encrucijada es clave para entender su música, que busca ser un espacio para la catarsis y la experimentación sonora.

Su canción Tried You On es una muestra de esta búsqueda. La pieza trabaja una mezcla intrigante de rock alternativo y pop, creando una atmósfera que se percibe oscura. Lejos de buscar el gancho fácil, la propuesta se basa en una experimentación que resulta disfrutable, atrayendo al oyente a su sonido particular sin concesiones evidentes.



La textura de ST. IVES se apoya en la experiencia individual de sus miembros. La voz distintiva de O’Neil ya es conocida en la escena australiana gracias a su trabajo en solitario. Por su parte, Blum aporta un historial de producción diverso, habiendo trabajado con artistas que van desde el grunge hasta el R&B, lo que explica la amplitud de su paleta sónica.

Este proyecto, que se ha gestado discretamente en el estudio, parece ser el resultado directo de esa necesidad de experimentación. Tried You On no es solo una canción, sino la materialización de esa catarsis. Es una propuesta que utiliza la oscuridad y la intriga del alt-pop como vehículo para una expresión que evita lo predecible.


La Herencia Sureña de “Sailboat in the Sky”

La Herencia Sureña de “Sailboat in the Sky”

El trío Nathan Bryce and Loaded Dice no es un producto improvisado; es el resultado de una formación cimentada en el rock clásico, el blues y el sonido sureño. Originarios de Missouri, este grupo ha pasado los últimos tres años en la carretera, un fogueo intensivo como banda de apoyo para el guitarrista Taj Farrant. Ahora, reclaman el escenario principal con una propuesta que fusiona la nostalgia con una energía palpable.

Su canción Sailboat in the Sky presenta la faceta más relajada del grupo. La pieza se aleja de la estridencia para ofrecer un ritmo tranquilo, donde la personalidad de la banda brilla con luz propia. Es una atmósfera amena, que combina el soul sureño con una distintiva textura de blues-rock que se siente a la vez clásica y moderna.



El carácter de la canción se construye sobre dos pilares: la guitarra eléctrica y la voz. Nathan Bryce utiliza su instrumento para tejer un ambiente que evoca una vibra costera, casi cinematográfica, con una arenilla swampy muy particular. La voz complementa esta base, aportando la calidez necesaria para redondear la pieza y capturar la atención del oyente.

Si bien la crítica ha aplaudido su capacidad para el rock de alta energía, Sailboat in the Sky demuestra el rango de Nathan Bryce and Loaded Dice. Es una muestra de su habilidad para controlar la dinámica y entregar una pieza que se sostiene en la calidad de su ejecución, probando que su legado de rock y soul está en buenas manos.


Kira Metcalf: La Voz Íntima en “Good”

Kira Metcalf: La Voz Íntima en “Good”

La propuesta artística de Kira Metcalf se enfoca en la creación de narrativas emocionales vívidas, utilizando melodías que combinan una cualidad inquietante con una delicada aspereza. Su trabajo no se limita al ámbito musical; también ha incursionado en la escritura, siendo autora de You and #MeToo, una publicación que aborda temas como el sexismo en diversos entornos.

Su canción Good es un ejemplo de cómo esta artista traduce esa narrativa en sonido. La pieza se construye sobre una atmósfera bien lograda, oscilando entre el indie rock con ciertas reminiscencias retro y matices de folk. Es un espacio sonoro que se siente personal e introspectivo.



En el centro de esta mezcla de influencias, la voz de Kira Metcalf es el elemento que brilla con más fuerza. Su interpretación es fundamental para el carácter de Good, dotando al tema de la cualidad emocional y la honestidad que se espera de una cantautora que aborda temas con esa sensibilidad lírica.

En esencia, Good es una pieza que utiliza el rock ligero y el folk como vehículo para una expresión muy directa. Es la continuación de un trabajo donde el arte y la escritura se alimentan mutuamente, generando un sonido que, sin ser grandilocuente, tiene la suficiente sustancia para captar la atención.