La música folk tiene una capacidad única para contar historias con una autenticidad cruda y una conexión profunda con las experiencias humanas. Dentro de este genro encontramos a Ryan Wayne, un cantautor canadiense que la habilidad para tejer relatos vívidos a través de sus canciones es algo resaltable.
Ryan Wayne es un músico canadiense cuya carrera musical se ha forjado a lo largo de los años, ganándose el respeto y el cariño de los amantes de la música folk. Su viaje musical comenzó como miembro fundador y compositor en la aclamada banda The Warped 45s, que ha cosechado premios y elogios de la crítica. Sin embargo, la vida le tenía preparados desafíos importantes.
A principios de 2022, Ryan Wayne sufrió dos derrames cerebrales que lo alejaron de los escenarios y estudios de grabación durante varios años. Pero como las historias de resiliencia y pasión por la música a menudo lo dictan, este período difícil también marcó su regreso al mundo de la música.
Entre las creaciones de Ryan Wayne se encuentra la intrigante canción “Bonafide Drifter”, una pista que explora las posibilidades expresivas y estéticas del folk. Esta canción se destaca por su capacidad para llevar a los oyentes a un mundo de sensaciones y emociones.
La historia detrás de “Bonafide Drifter” se origina en un poderoso “derecho”, un término que se utiliza para describir una tormenta severa, que devastó el noreste de los Estados Unidos, dejando a gran parte de la región sin electricidad. Ryan Wayne y su esposa decidieron emprender un viaje por carretera hacia las montañas Blue Ridge y Asheville, Carolina del Norte, en medio de esta adversidad. Con su hija pequeña en el asiento trasero, se encontraron con hoteles cerrados debido al apagón y estaciones de gasolina también fuera de servicio. La situación se volvía cada vez más desafiante, con el tanque de gasolina casi vacío y la necesidad urgente de encontrar alojamiento.
Finalmente, encontraron un lugar que solo aceptaba efectivo y con una linterna en la mano, se dirigieron a su habitación. Pero la aventura no terminó allí. En el estacionamiento, Ryan Wayne se encontró con un hombre oportunista, vestido con una camiseta sin mangas y una gorra de camionero, quien estaba bombeando gasolina a mano desde un gran barril en la parte trasera de su camioneta, con un cigarrillo encendido en la boca, y todo a un precio exorbitante de $10 por galón.
“Bonafide Drifter” nació de esta experiencia única y desafiante. La canción captura la esencia de ese viaje y las emociones que lo acompañaron. La voz de Ryan Wayne, llena de expresión y acompañada por una narrativa poética, se convierte en el hilo conductor de la canción, mientras la música folk envuelve a los oyentes en una experiencia musical densa y envolvente.