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Maria-Ines: la voz mexicana que conecta emociones desde Liverpool

Maria-Ines: la voz mexicana que conecta emociones desde Liverpool

Maria-Ines es una cantautora mexicana radicada en Liverpool que se ha consolidado como una de las voces emergentes más auténticas del pop-folk contemporáneo. Su propuesta combina sensibilidad lírica, melodías cautivadoras y una honestidad emocional que logra traspasar fronteras, tanto geográficas como culturales.

El 17 de octubre de 2025, Maria-Ines lanzó su esperado EP debut, Mixed Emotions, un proyecto de cinco canciones que fusiona pop, folk y pop comercial. Cada tema del EP refleja su capacidad de crear canciones profundamente personales, pero a la vez universales, que hablan de amor, pérdida, crecimiento y vulnerabilidad. La canción que da nombre al álbum, “Mixed Emotions”, aborda la difícil decisión de dejar ir a alguien, capturando la tensión entre aferrarse a lo familiar y buscar liberación emocional.



Dentro de este mismo EP, destaca “Lo Ético”, la única canción en español, que refleja la conexión de Maria-Ines con sus raíces mexicanas y su proceso de autodescubrimiento viviendo lejos de casa. Con un sonido pop-folk delicado y letras íntimas, la canción aborda cómo los conflictos internos y emociones nos acompañan a pesar de la distancia, creando un espacio sonoro vulnerable, melancólico y esperanzador. Aunque gran parte de su público no habla español, “Lo Ético” ha logrado conectar profundamente con los oyentes, demostrando que la emoción y la sinceridad trascienden cualquier idioma.



A lo largo del último año, Maria-Ines ha llevado su música a escenarios de Liverpool, Londres y Mánchester, consolidando su reputación por su narrativa honesta, su lírica emotiva y su presencia escénica cautivadora. Cada presentación es una invitación a compartir experiencias universales a través de la música, y sus canciones logran generar una conexión inmediata con el público.

Con Mixed Emotions, Maria-Ines no solo presenta su talento como compositora y cantante, sino que también abre una ventana a su mundo emocional, uniendo sus raíces latinoamericanas con la influencia musical del Reino Unido y estableciéndose como una artista que sabe combinar sensibilidad, autenticidad y una propuesta musical sólida que no deja indiferente a nadie.


Kewl Haze y la frescura indie de “Used to Have It All”

Kewl Haze y la frescura indie de “Used to Have It All”

El dúo de Filadelfia Kewl Haze, integrado por Dan Scott Forreal y Derek Sheehan, ha sabido moverse entre la psicodelia y el rock con un estilo que mezcla introspección y desenfado. Su debut Suburban Sherpa les tomó cuatro años de trabajo entre estudios caseros y profesionales, un proceso marcado por experiencias personales y un enfoque ligero hacia la creación. Esa manera de entender la música como un espacio de libertad se refleja también en sus nuevas propuestas.

Entre ellas destaca “Used to Have It All”, una canción que se sostiene en un ritmo simple pero efectivo. Lo que la hace atractiva es su capacidad de transmitir un corazón encantador que atrapa con facilidad, sin necesidad de artificios. Su sonido se mueve dentro del indie pop, pero con pequeñas pinceladas dreamly que aportan un aire distinto, generando una atmósfera que se siente cercana y al mismo tiempo envolvente.



La dinámica de Kewl Haze en el estudio, marcada por conversaciones y momentos de camaradería, se traduce en canciones que no buscan la perfección rígida, sino la honestidad. En “Used to Have It All”, esa filosofía se percibe en la naturalidad con la que fluye la pieza, mostrando que la sencillez puede ser un recurso poderoso cuando se combina con sensibilidad y coherencia sonora.

Al escuchar “Used to Have It All”, se percibe una propuesta que conecta con la esencia del indie pop contemporáneo, pero sin perder el sello personal del dúo. No es un tema que pretenda reinventar el género, sino que ofrece una experiencia fresca y directa. En esa mezcla de simplicidad y encanto, Kewl Haze reafirma su capacidad de crear canciones que invitan a dejarse llevar por su ritmo y su atmósfera ligera.


MOLTENO: Alt-Pop Etéreo que Fusiona Música, Arte y Emociones

MOLTENO: Alt-Pop Etéreo que Fusiona Música, Arte y Emociones

La artista londinense MOLTENO se ha consolidado como una de las voces más distintivas del alt-pop etéreo, combinando música, narrativa visual y experiencias sensoriales únicas. Compositora, productora, multiinstrumentista y vocalista, MOLTENO crea paisajes sonoros inmersivos que mezclan dream pop, alt R&B y trip hop, llevando a sus oyentes a universos donde lo real y lo surreal se entrelazan. Su trabajo ha sido comparado con el de Björk y Bat For Lashes, recibiendo elogios de medios como WONDERLAND, EARMILK y NOTION, así como apoyo de BBC Radio 6 Music.



Actualmente, MOLTENO está promocionando su sencillo “Treading Water”, primer adelanto de su EP Element 3, parte de su ambiciosa serie de cuatro elementos. Este tema explora el elemento agua, abordando la fragilidad, la entrega y la resiliencia en el amor, retratando la lucha de mantenerse a flote cuando las relaciones se sienten abrumadoras. Con vocales delicadas, texturas de piano hipnóticas y arreglos orquestales, la canción refleja la dualidad del agua: calmante y peligrosa a la vez, y reafirma su capacidad de combinar sonidos etéreos con emociones crudas y vulnerables.

Más allá de la música, MOLTENO colabora con diseñadores de moda sostenible y artistas visuales, creando un estilo propio que combina colores futuristas con una estética envolvente. Sus actuaciones en vivo, incluyendo festivales como Camp Bestival y Camden Assembly, han demostrado su magnetismo sobre el escenario, transformando cada presentación en una experiencia multisensorial.


SODAPOP y la fantasía “Starbeam Machine”

SODAPOP y la fantasía “Starbeam Machine”

Desde Denver, SODAPOP propone un recorrido distinto en su álbum debut Melodia, un proyecto que mezcla indie pop de dormitorio con tintes de disco y una clara intención de construir un universo paralelo. El sencillo Starbeam Machine, presentado como el primer track del disco, se sitúa en esa intersección entre lo sonoro y lo imaginado. La canción se abre paso con un aire dreamy, acompañando el concepto de un mundo ficticio que el artista lleva elaborando durante cinco años.

La inspiración detrás del álbum nace de un espacio mental que se transformó en la tierra fantástica de Melodia, un bosque acuático donde la música es la base cultural. En este contexto, Starbeam Machine funciona como introducción a esa narrativa, con letras que toman experiencias personales y las transforman en metáforas. El resultado se mueve entre lo íntimo y lo lúdico, mostrando cómo la nostalgia y el deseo pueden coexistir en un mismo plano sonoro.



El proceso creativo de SODAPOP ha sido igual de particular. Armado con un teclado portátil y una guitarra, compuso gran parte de las canciones junto a unas vías de tren, usando la improvisación como método. Esa mezcla de acordes mayores y menores refleja un sentimiento agridulce que permea todo el disco. En Starbeam Machine este recurso se convierte en la base para transmitir la dualidad de lo feliz y lo melancólico, una constante en su propuesta artística.

Formado en Santa Bárbara y con experiencia de vida en Tailandia y Serbia, el músico ha consolidado un estilo propio desde su regreso a Estados Unidos en 2020. Con más de un millón de reproducciones acumuladas y presencia en listas de Spotify, SODAPOP se posiciona como una voz dentro del indie pop contemporáneo. Con Starbeam Machine, abre la puerta a un álbum que no sólo quiere sonar, sino también habitar un espacio imaginario donde música y fantasía se confunden.


El encierro que se convirtió en música

El encierro que se convirtió en música

Nothing Feels Right es el tercer sencillo de Sleepers Club, una pieza que camina entre el dreamy y el indie rock con una melodía de guitarra que respira calma. No busca estridencias, sino sumergir al oyente en un estado suspendido, casi como si el tiempo se estirara en cada compás. Es un tema que sugiere movimiento sin prisa, un viaje interno más que externo.

La historia de su creación se remonta a abril de 2020, cuando Sydney Ward y Damon Moon se encontraron encerrados por el inicio de la pandemia. Lo que iba a ser una simple sesión de grabación se transformó en semanas de escritura improvisada, donde el estudio fue refugio y laboratorio sonoro. Allí, entre micrófonos desinfectados y amplificadores encendidos, nacieron decenas de canciones.



Después de ese periodo, llegó un cierre abrupto. Sin plan definido, decidieron guardar el material en un disco duro, dejándolo reposar sin prisa. El tiempo pasó, y la vida siguió su curso, hasta que la sensación de incertidumbre que motivó aquellas grabaciones regresó. Fue entonces cuando decidieron volver a abrir esas carpetas.

Nothing Feels Right es parte de ese reencuentro. No es una pieza que busque respuestas claras, sino una que comparte el mismo aire del que nació: el de dejar que la música hable por sí misma, incluso cuando las palabras no alcanzan para describir el momento.


Cuando el silencio habla: Julan y el enigma de la calma

Cuando el silencio habla: Julan y el enigma de la calma

Hay canciones que no necesitan levantar la voz para ser escuchadas. Julan, el proyecto musical de Moritz Wanger, se adentra en esa zona tranquila donde el silencio pesa tanto como el sonido. Con Mystery of Silence (Radio Edit), presenta una pieza que no busca apurarse ni impresionar de entrada. Se toma su tiempo. Su tempo lento y los sonidos electrónicos crean un espacio suspendido, casi como si la canción flotara.

La propuesta de Julan nace desde un proceso interno más que comercial. Después de trabajar en bandas sonoras y composiciones orquestales, Wanger redirige su energía hacia algo más íntimo, más despojado. Este tema en particular funciona como un puente entre lo etéreo y lo humano, con una producción que prioriza lo sutil. El estribillo final, que llega a los 2:36, ofrece una apertura emocional inesperada, como si el silencio mismo se quebrara por un instante.



Grabado en los paisajes naturales del norte de Nueva Gales del Sur, en un estudio rodeado de selva y océano, el sonido de Mystery of Silence (Radio Edit) parece llevar algo de ese entorno consigo. No hay estridencia, solo capas que se despliegan con paciencia, guiando al oyente hacia una sensación de introspección. La canción invita, más que dirige. Observa, más que actúa.

Julan no se presenta como una respuesta, sino como una pregunta en forma de música. Esta versión radio edit es solo una parte del panorama; la versión completa, con su introducción ambiental, puede encontrarse en el álbum. Ambas comparten un mismo pulso: el de una búsqueda que no teme al silencio, y que entiende que a veces, en lo lento, en lo quieto, también hay fuerza.


Curiosidad a flor de piel: la melancolía luminosa de Skinny Dippers

Curiosidad a flor de piel: la melancolía luminosa de Skinny Dippers

En medio del incesante vaivén que caracteriza la escena indie actual, Skinny Dippers ofrece un respiro sin pretensiones con su nueva canción I Just Can’t Help Feeling Curious. El proyecto liderado por Ryan Gross, con base en Brooklyn pero con raíces en la costa de Maine, parece seguir buscando el equilibrio entre la introspección personal y los paisajes musicales que evocan tardes al borde del mar. La canción mantiene ese sello suyo: melodías suaves, armonías corales y guitarras que flotan sin urgencia.

La colaboración con miembros de TOLEDO en su anterior álbum The Town & The City no fue un accidente. Esa influencia se deja sentir en esta nueva entrega, donde la mezcla de indie rock con elementos de folk y dream pop se mantiene vigente. Pero lo que destaca aquí no es el género, sino la forma en la que Skinny Dippers transforma un sentimiento común —la curiosidad emocional, la duda que roza la nostalgia— en un paisaje que parece tan personal como colectivo.



I Just Can’t Help Feeling Curious no recurre a grandes gestos ni a una producción saturada, al contrario, se apoya en lo mínimo necesario para que la letra respire y la melodía haga su trabajo sin forzar nada. La canción fluye como si estuviera escrita para ser escuchada sin apuro, ideal para aquellos momentos en los que uno necesita conectar con algo que no explique demasiado pero acompañe igual.

Hay una estética costera que permanece como fondo invisible en todo lo que hace Skinny Dippers. No solo por su origen, sino por la forma en que su música invita a la contemplación y al recuerdo, este nuevo sencillo no rompe moldes ni intenta epatar, pero en su honestidad y sencillez radica su valor. Vale la pena escucharlo, dejarse llevar por esa curiosidad, y tal vez encontrar ahí un poco de uno mismo.


Quells y la nostalgia que respira en “Lucky”

Quells y la nostalgia que respira en “Lucky”

Desde los rincones más brumosos del indie actual emerge Quells, el proyecto solista de Adam Fitzgerald, con su canción Lucky, una pieza que no necesita levantar la voz para hacerse notar. Su sonido dreamy se desliza lentamente, como una corriente que arrastra al oyente sin avisar. La voz baritono se mantiene suspendida, flotando entre capas de texturas que más que acompañar, abrazan.

Quells, con base en Detroit y pasos previos por Edimburgo y Colorado, no sigue una ruta definida, y en Lucky eso se nota. La canción no busca el golpe inmediato, sino la construcción de un ambiente que permita perderse dentro. La herencia de proyectos como Shady Groves o Moon Lake se percibe, pero aquí hay un tono más contenido, casi íntimo, donde lo que se dice importa tanto como lo que se calla.



Hay algo deliberadamente difuso en la manera en que Lucky avanza. No pretende una progresión clara, sino una expansión envolvente, al estilo de Slowdive o Beach Fossils. Lo emocional no se subraya, se filtra lentamente en el oyente, entre notas que se repiten y voces que apenas rozan. La producción apuesta por el detalle sutil, y eso le da consistencia sin saturar.

Para quienes disfrutan perderse en paisajes musicales donde cada escucha revela algo nuevo, Quells ofrece una ruta que vale la pena explorar. Lucky es más un estado que una canción, una invitación a detenerse en medio del ruido diario. Más que estar hecha para encajar en una lista de éxitos, es para quienes necesitan una pausa y un refugio.


Wombo y la realidad de Danger in Fives

Wombo y la realidad de Danger in Fives

En un panorama donde el indie pop suele transitar caminos conocidos, Wombo propone un desvío interesante con “Danger in Fives”. La banda de Louisville, Kentucky, construye esta canción como una especie de espejismo sonoro: familiar por momentos, pero siempre lista para escapar de cualquier encasillamiento. La estructura es libre, pero no caótica; lo suficiente para que uno se sienta envuelto sin saber del todo por qué.

La voz de su vocalista actúa como guía en este paisaje difuso. Su tono agudo y casi etéreo no se impone, más bien flota, dejando una estela que define el ambiente con sutileza. La atmósfera que logra no es casual, sino parte del ADN de un grupo que prefiere mirar el mundo a través de un prisma distinto, sin la necesidad de explicarlo todo.



Lo que en otras bandas sería un riesgo, en Wombo parece una decisión natural. Las influencias del pasado punk pop de sus integrantes no desaparecen del todo, pero aquí se diluyen en capas más suaves, más introspectivas. “Danger in Fives” no se apoya en un estribillo pegajoso, sino en una tensión controlada que se sostiene gracias al equilibrio entre voz, ritmo y espacio.

Este nuevo lanzamiento no busca grandes declaraciones. Más bien, se asienta como una pieza más del universo paralelo que Wombo ha venido construyendo desde sus inicios. Y en ese universo, las canciones no se explican: se sienten como breves visitas a un lugar que parece real, aunque uno no sepa del todo dónde está parado.


Thom Chapman: Psicodelia y Arte en una Sinfonía de Sueños

Thom Chapman: Psicodelia y Arte en una Sinfonía de Sueños

Thom Chapman es un músico y creador que invita a sumergirse en paisajes sonoros donde convergen el psych pop, el dream pop y el art rock oscuro. Originario de una trayectoria que combina la música con un fuerte trasfondo en las artes visuales, Thom ha logrado desarrollar un sonido que evoca tanto la nostalgia de los años 60 como la frescura del surrealismo contemporáneo.

Thom también es la mente creativa detrás de Fox Grin, un proyecto de indie art rock, y A Co., un conjunto instrumental de beats chill su versatilidad y creatividad lo han llevado a compartir escenario con artistas como Becca Mancari, Boy Orbison y Angel Snow, e incluso abrir para Brittany Howard durante la gira con Mancari.



Recientemente, Thom lanzó “Dopamine”, una canción que encapsula a la perfección su estilo distintivo. Esta pieza es un viaje psicodélico envuelto en guitarras difusas, armonías soñadoras y letras que exploran el enigma del amor a primera vista y la ilusión de felicidad que crea el romance químico. La combinación de sonidos y emociones hace que “Dopamine” sea a la vez hipnótica y profundamente eufórica, recordando a la banda sonora de una ruptura en un mundo lleno de neones y magia retro.