Desde las entrañas de la vida nocturna de Brooklyn surge una banda que encarna el pulso de la ciudad después de la medianoche. Honeysucker, un dúo inicialmente formado por los músicos indie-pop Jack Brickner y Sam Wright, se ha transformado en un cuarteto.
La búsqueda de una nueva chispa creativa llevó a Brickner y Wright a unirse y dar forma a una propuesta musical que se inspira en una amplia gama de influencias, desde la new wave y el indie hasta el R&B y el pop. Con la incorporación de Zach Kornhauser y Gavi Kutliroff a su formación en vivo, su música es un viaje a través de sonidos nostálgicos de finales de los años 70, con destellos de psicodelia y momentos de pura sensualidad, todo ello enmarcado en un estilo indie pop que resuena con una audiencia ávida de nuevas experiencias musicales.
Su último sencillo, “Private Meeting”, lanzado el 31 de mayo, es un ejemplo de la magia que Honeysucker. Con una atmósfera sexy y toques clásicos, esta canción transporta al oyente a un mundo de misterio y seducción, donde cada nota musical cuenta una historia de encuentros fugaces en la oscuridad de la noche.
Con influencias del rock clásico y toques de indie pop, la canción evoca una sensación de nostalgia y pasión, capturando la esencia de la vida nocturna de la ciudad. Con una voz suave y una instrumentación cautivadora, “Private Meeting” promete llevar al oyente en un viaje emocionante a través de las calles lluviosas de Brooklyn y los encuentros fugaces en la oscuridad de la noche.