Desde la lejana Australia hasta las tierras del Reino Unido, Fendahlene, una banda indie rock conformada por Paul Whiteley en guitarras y voz, y Ashley Hurst en el bajo, ha estado dejando su huella en la escena musical. Con influencias que abarcan desde el rock de los años 60 y 70 hasta el indie y el alt-rock de los 90 y 2000, así como el alt-country, su música se teje con elementos de distintas épocas y géneros.
Después de una década de presencia en la escena musical de Sydney, donde lograron notables logros, como tener canciones en campañas publicitarias nacionales y rotación en estaciones de radio comerciales, la banda tomó un nuevo rumbo al trasladarse a Europa. Allí grabaron su álbum “High and Low and Back Again” en el prestigioso Urchin Studios de Londres, lanzado en 2020. Su música se nutre de una mezcla de influencias y su sonido ha ido evolucionando con cada paso.
Su nuevo sencillo “Brilliant Sun” marca un punto de evolución en el sonido de Fendahlene. La canción, compuesta durante el punto álgido de la pandemia de COVID-19, busca transmitir un mensaje de esperanza en medio de la desesperación. El tema es universal, aplicable a situaciones personales, comunales y globales desesperadas, la canción invita a encontrar la luz al final del túnel y a ver lo positivo incluso en los momentos más oscuros.
La evolución musical de Fendahlene se manifiesta en “Brilliant Sun” a través de capas de sonido, desde riffs de guitarra de 12 cuerdas hasta armonías de respaldo intensas. Los elementos del rock espacial y la neo-psicodelia añaden una atmósfera de ensueño que anima a los oyentes a respirar profundo y encontrar razones para la esperanza.
Con cada nota de “Brilliant Sun”, Fendahlene demuestra su habilidad para fusionar influencias y crear un sonido fresco y evocador. La banda continúa su trayectoria musical, explorando nuevos territorios sonoros y dejando una impresión duradera en la escena indie rock.
