El Hijo de Roy es un proyecto musical, liderado por el talentoso Santiago Pacheco, se erige como una propuesta fresca y emocionante que fusiona el electropop con letras emotivas y una estética visual única.
Originario de la vibrante ciudad de Quito, Ecuador, Santiago Pacheco ha sabido plasmar en su música la diversidad y riqueza cultural de su entorno. Con una formación sólida en producción musical, redacción creativa y publicidad, Pacheco ha demostrado una versatilidad creativa que se refleja en cada acorde y letra de sus canciones.
Uno de los aspectos más destacados de El Hijo de Roy es su compromiso con la representación y la inclusión. A través de sus temas más recientes, Pacheco busca reivindicar y celebrar las historias de amor feliz en la comunidad LGBTIQ+, ofreciendo así una voz importante en un mundo que necesita más diversidad y aceptación.
Las influencias musicales de El Hijo de Roy son tan variadas como cautivadoras. Desde el pop sueco hasta íconos internacionales como Madonna, Miranda!, ABBA, Britney Spears, y artistas contemporáneos como Miike Snow, Babasónicos, Robyn y Roisin Murphy, cada una de estas influencias se entrelaza para crear un sonido único y envolvente que atrapa a los oyentes desde el primer compás.
El primer sencillo de El Hijo de Roy, titulado “Chico Espacial”, es un auténtico himno de pop electrónico que no deja a nadie indiferente. Con una energía contagiosa y una colaboración de destacados artistas ecuatorianos como Mariela Espinosa, Juan Ernesto Guerrero y Nicolás Dávila, esta canción es un testimonio del talento y la creatividad de Pacheco.
Desde los primeros acordes, “Chico Espacial” nos transporta a un viaje cósmico lleno de emociones y sonidos vibrantes. Con una mezcla perfecta de pop electrónico y sintetizadores ochenteros, esta canción es un torbellino de energía que invita a perderse en su atmósfera envolvente.
Pero más allá de su cautivante melodía, “Chico Espacial” es una historia de amor queer que desafía las fronteras del espacio y el tiempo. Con letras emotivas y evocadoras, El Hijo de Roy nos sumerge en un universo de emociones, explorando temas como la pérdida, la alienación y la necesidad humana de conexión.
Una de las características más destacadas de “Chico Espacial” es su capacidad para conjugar lo melancólico con lo enérgico. Desde la melancolía inicial, donde la guitarra y la voz de Pacheco evocan el vacío del espacio, hasta la segunda mitad llena de ritmo y vitalidad, donde los sintetizadores y el beat bailable nos hacen sentir que nada puede ser tan grave cuando no existe la gravedad.