Fake Dad formado en 2020 por Andrea de Varona (ella/ella) y Josh Ford (él/él), este dúo con sede en Los Ángeles ha conseguido combinar hábilmente el synth-pop con el indie rock, creando un sonido único que captura tanto la energía de las guitarras en capas como la calidez de los sintetizadores.

La historia de Fake Dad comienza en una fiesta universitaria en el East Village de Nueva York, donde Andrea y Josh se conocieron por casualidad. Desde ese encuentro, la conexión musical entre ellos fue instantánea, y rápidamente empezaron a colaborar, fusionando sus influencias y estilos musicales. Aunque provienen de trayectorias distintas —Andrea con raíces en el pop y la música electrónica, y Josh con una inclinación hacia el rock y el indie—, encontraron un terreno común en la creación de música que no solo refleja sus experiencias personales, sino que también busca conectar emocionalmente con su audiencia.



La música de Fake Dad se caracteriza por una mezcla intoxicante de sintetizadores coloridos, guitarras bañadas por el sol y ritmos pegajosos que capturan tanto la nostalgia como la frescura de lo contemporáneo. Sus canciones son conocidas por los ganchos pop-laden irresistibles y por la lírica de Andrea de Varona, cuya voz etérea añade una dimensión emocional única a cada tema.

«Touch Me», llamado la atención por su fusión de lo íntimo y lo expansivo. Inspirada en las palabras de la escritora Joan Didion y el estilo vocal de Dolores O’Riordan (The Cranberries), «Touch Me» explora la idea de usar el placer carnal como un escape temporal de la sensación de que la vida está pasando demasiado rápido.

Andrea de Varona ofrece una interpretación vocal cautivadora, mientras su voz navega por sobre guitarras soleadas y sintetizadores envolventes, construyendo una atmósfera que alterna entre lo nostálgico y lo moderno. La canción ha resonado especialmente en TikTok, donde ha encontrado un público que conecta con la sensibilidad melancólica y soñadora de la banda.

Antes de «Touch Me», Fake Dad lanzó su primer EP, Yerba Mala, una obra de cinco canciones que explora las complejidades de las relaciones interpersonales en un mundo en constante cambio. El EP también ofrece una mirada íntima a la experiencia de Andrea como una persona Latinx de primera generación, abordando temas de identidad, pertenencia y herencia cultural.

Con influencias que van desde el pop electrónico hasta el rock alternativo, Yerba Mala es un viaje sonoro que demuestra la habilidad del dúo para combinar géneros y crear una experiencia auditiva envolvente. El EP recibió elogios de medios influyentes como The FADER, LADYGUNN, y Live Nation’s Ones to Watch, y se posicionó en la lista NACC Top Adds, lo que consolidó su lugar en la escena indie emergente.


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