En la vibrante ciudad de Austin, Texas, la visión de Zach Black comenzó a tomar forma y sacudió la escena musical con la energía de “Triumphant Monsters” Esta canción, cargada de potentes influencias de rock, destaca por su brillante protagonismo de la guitarra eléctrica. Desde los primeros acordes, su ritmo dinámico y juguetón envuelve al oyente en una experiencia sonora llena de intensidad, donde la producción detallada y la poderosa voz de Zach aportan personalidad y fuerza a cada segundo del tema.
El viaje de Souls Extolled comenzó como un sueño universitario en la mente de Zach. Inspirado por géneros como el punk, metal, reggae-ska y el rock psicodélico, Zach fusionó estos estilos para crear algo único. La banda, que ve la luz en 2019, suena como el hijo rebelde de Ozzy Osbourne y Rancid, bajo una alucinante influencia psicodélica.
Sin embargo, esta visión no fue inmediata. Originario de Honolulu, Zach puso temporalmente en pausa su sueño mientras se sumergía en otros proyectos musicales. El amor por clásicos como Paradise Lost y las eternas canciones de punk y rock lo llevaron de regreso a su pasión inicial. En 2018, el destino intervino cuando conoció a JP Ortiz, un bajista veterano de Austin con vasta experiencia en la emblemática 6th Street. La química musical fue instantánea, y juntos comenzaron a construir lo que se convertiría en Souls Extolled.
JP no era el único ingrediente necesario. El pasado de Zach tenía otra pieza clave: Joe Valadez, un talentoso baterista con quien Zach había compartido escenario durante sus años universitarios. Joe, proveniente de Houston, trajo consigo una rica experiencia en bandas de jazz y marcha, completando el trío con su estilo enérgico y preciso. En 2018, Souls Extolled tomó forma definitiva, con cada miembro aportando su propio trasfondo para crear una banda que combina la pasión por lo clásico con una visión fresca y moderna.